6. Garantización y mejora efectivas de la vida del pueblo y salvaguardia de la armonía y estabilidad de la sociedad
Concediendo importancia a la garantización básica, el aseguramiento del cumplimiento de las exigencias mínimas y la implantación de los mecanismos correspondientes, ante una presión grande sobre los gastos fiscales, hemos puesto el tesón en obrar con todos los medios a nuestro alcance y hemos aumentado constantemente la inversión en los terrenos relativos a la vida del pueblo.
Primero: aumento continuo de los ingresos de la población. Junto con la profundización continua de la reforma del sistema de distribución de los ingresos, se ha promovido por múltiples canales la subida de los ingresos del campesinado, y por décimo año consecutivo hemos alzado el nivel de la pensión de vejez básica de los jubilados de las empresas, así que las medidas de aumento de ingresos y la política de empleo han formado una fuerza convergente beneficiadora del pueblo. Se ha dado un aumento real del 8% en los ingresos per cápita disponibles de la población del país, con un aumento real del 9,2% en los de la población rural y del 6,8% en los de la urbana. Por primera vez en 13 años, la razón entre los ingresos de la población urbana y los de la rural no llega a tres.
Segundo: tejedura de una red de seguridad social confiable cada vez más compacta. Con una mayor ampliación de la cobertura de toda clase de la seguridad social, tenemos en las zonas urbanas 366 millones de tomadores del seguro de vejez básico y en las zonas rurales 477 millones de tomadores del nuevo tipo de seguro social de vejez. Se ha implementado un sistema unificado del seguro de vejez básico para la población tanto urbana como rural y se ha elevado la cuantía normativa de la pensión social de vejez, con beneficio para 143 millones de ancianos. Hemos mantenido establemente por encima del 95% la tasa de incorporación a tres seguros de asistencia médica básica -el de asistencia médica básica para los trabajadores urbanos, el de asistencia médica básica para la población urbana y el del nuevo tipo de asistencia médica cooperativa rural-. Nos hemos dedicado de lleno a atajar peligros y dar auxilio a los damnificados en los desastres naturales graves, como los terremotos de Ludian y Jinggu, y la rehabilitación y reconstrucción posdesastre ha avanzado de manera ordenada.
Tercero: impulso sólido del desarrollo del programa de viviendas de protección social. Se ha reforzado el apoyo a la construcción de apartamentos del programa de viviendas de protección social, incluida la transformación de los núcleos de chabolas, a cargo de las inversiones englobadas en el presupuesto central, la financiación con bonos empresariales y los fondos crediticios. En las zonas urbanas, en dicho programa, se ha dado conclusión básica a la construcción de 5,11 millones de apartamentos y se ha iniciado la de otros 7,4 millones.
Cuarto: progreso integral de los servicios de interés social. Con el mejoramiento continuo de las condiciones básicas para la docencia de las escuelas deficientes de la educación obligatoria en las zonas pobres, se prevé que la retención de los alumnos desde la matriculación hasta la graduación a lo largo de los nueve años de educación obligatoria haya llegado al 92,6% y que la tasa de matriculación bruta en el ciclo superior de secundaria se haya puesto en el 86,5%, y se ha elevado de continuo el porcentaje de la admisión de alumnos rurales que hacen los centros docentes superiores prioritarios. Hemos reforzado más el fomento del sistema de servicios sanitarios públicos e iniciado la creación de un sistema de capacitación reglamentada de médicos residentes. La política del segundo hijo para matrimonios con un cónyuge unigénito se ha aplicado de modo generalizado. Se ha acelerado más el fomento del sistema de servicios culturales públicos, y la tarea de la cobertura radiofónica y televisiva de las aldeas carentes de señal ha culminado en lo fundamental. El número de turistas domésticos ha llegado a 3.610 millones, un 10,7% más que el año precedente, y el de turistas con destino al exterior ha superado por primera vez los 100 millones. Se ha iniciado la ejecución del importante programa de servicios para la salud y la tercera edad, y el número de camas en los asilos ha llegado a 26 por cada mil ancianos. La industria deportiva y el consumo deportivo se han desarrollado más presurosamente, y el número de locales deportivos ha aumentado en 67.000. Hemos seguido fortaleciendo el sistema de servicios de rehabilitación y cuidado en asilos para personas discapacitadas, y prevemos que las instalaciones de servicios exclusivos para ellas hayan totalizado 3.867.
A juzgar por la ejecución de los índices planeados, se han mantenido dentro de un margen racional los de tipo general, tales como el de crecimiento económico, el índice general de precios, el de equilibrio de la balanza de pagos y el de empleo, mientras que algunos índices que reflejan la estructura y la calidad de la economía han mejorado aún más, y los relativos al desarrollo social y la garantización de la vida del pueblo han seguido en buena dirección, y se han cumplido bastante satisfactoriamente los tocantes al uso economizador de los recursos y a la preservación medioambiental, de manera que en términos generales tenemos un buen cumplimiento de los índices planeados.
En cuanto a los 17 índices de carácter obligatorio, hemos alcanzado en su totalidad las metas planeadas. Los valores previstos de dos de ellos -el de aumento de suelos para la construcción y el de aumento de la ocupación de tierras de uso agrícola para la construcción- han sobrepasado las metas proyectadas que habíamos fijado a comienzos de año. Ello se debe principalmente a dos motivos. Primero, que, en el proceso de la rehabilitación postsísmica de Ludian, en Yunnan, de acuerdo con la ley, y con anticipación, se ha usado una porción de la tierra aumentada para la construcción, y los trámites correspondientes se complementarán según lo estipulado. Y el segundo motivo es que, en el curso del emprendimiento de trabajos como el de vincular el incremento de los terrenos destinados a la construcción en las zonas urbanas con su disminución en las rurales, o el de la rerroturación y aprovechamiento de los terrenos abandonados de las zonas industriales o mineras, una parte de los terrenos aumentados asignados a la construcción se han utilizado anticipadamente para edificar reasentamientos de campesinos, y después se hará el equilibramiento entre las tierras de construcción ocupadas y las añadidas para compensarlas cuando esté terminada la rerroturación del suelo.
En lo que respecta a los 40 índices de carácter expectativo, en general su ejecución concuerda con la expectativa o es mejor, pero el valor ejecutado de algunos de ellos difiere de su valor expectativo. Cabe señalar que, puesto que las metas planeadas de los índices de carácter expectativo no son valores pronosticados, sino metas de desarrollo de la expectativa del Estado, y encarnan la orientación de las políticas, el resultado real de la ejecución puede ser superior o inferior a las metas expectativas. El distanciamiento entre el valor de ejecución de una porción de los índices y sus metas expectativas obedece a una variedad de circunstancias. Primero, algunos índices tienen por sí mismos naturaleza de índices tope, y es normal que el resultado real de su ejecución sea adecuadamente inferior a las metas expectativas, como pasa con el índice de precios al consumidor (IPC) y otros. En un segundo caso, para interpretar el rumbo de las políticas de macrocontrol, algunos índices pueden ser fijados un poco más por encima del valor pronosticado, cosa que incluye índices como el ritmo de crecimiento del valor global de las ventas al por menor de los bienes de consumo de la sociedad, y por eso entre el resultado real de la ejecución y las metas expectativas puede existir cierta separación. En tercer lugar, hay factores especiales causantes de que algunos índices salgan más bajos que las expectativas. Por ejemplo, después del tercer censo económico, ha aumentado el volumen global de la economía, lo cual ha ocasionado que la proporción de los fondos asignados a investigación y a experimentación y desarrollo respecto del PIB haya sido ligeramente inferior a las metas expectativas. Y un cuarto caso es que el impacto de las alteraciones del entorno económico nacional e internacional, y de otros factores incontrolables, ha motivado que los valores reales de algunos índices hayan sido inferiores a las metas expectativas. Un ejemplo: la caída en gran margen de los precios de los productos básicos en el mercado internacional ha conducido a que el ritmo de aumento del volumen global de las importaciones y exportaciones cotizadas en dólares fuera más lento que la meta expectativa.
En resumen, la variada y compleja situación política y económica mundial y la continua aparición de nuevos problemas y nuevos desafíos en el desarrollo interno han condicionado que no nos fuera nada fácil conseguir éxitos como estos que hemos alcanzado en el desarrollo económico y social de nuestro país. Estos han sido resultado de la correcta dirección del Comité Central del Partido y del Consejo de Estado, resultado de los esfuerzos mancomunados de las diversas autoridades locales y departamentos, y resultado de la lucha unida del pueblo de todas las etnias del país, por lo que merecen ser afirmados a plenitud y apreciados más que nunca. Al mismo tiempo, somos también conscientes de que, por el entrelazamiento mundial de los factores políticos, económicos y geográficos, la economía global aún se halla en un profundo reajuste tras la crisis financiera internacional y tiende en general a una larga y lenta recuperación. Dentro del país, por motivo de la subsistencia tanto de problemas de desequilibrio, descoordinación e insostenibilidad largo tiempo acumulados como del influjo del solapamiento de las tres fases -la del cambio de marcha del crecimiento económico, la de los dolores previos al alumbramiento de su reajuste estructural y la de la asimilación de las políticas incentivadoras adoptadas en tiempos anteriores-, el funcionamiento de la economía se enfrenta a no pocas dificultades y desafíos.
En primer lugar, la presión originada por el descendente ritmo de crecimiento de la economía sigue en aumento. El ritmo de aumento de la inversión, que desempeña un papel clave para la estabilización del crecimiento, sigue moderándose; será difícil elevar en gran medida la demanda del consumo; va a costar mucho que la demanda exterior mejore notablemente; y el agotamiento de los viejos focos de crecimiento coexiste con la ausencia de otros nuevos. En segundo lugar, parte de las empresas tropiezan con dificultades en la producción y gestión. El IPP (índice de precios al productor) de salida está bajando constantemente; las expectativas deflacionarias van en alza; suben los costes de los elementos de producción, tales como los fondos y la fuerza laboral; no hay una fluida conducción de fondos crediticios a la economía real; no se ha dado alivio definitivo al problema de la difícil y costosa financiación de las pequeñas empresas y las microempresas; y las ganancias empresariales se están achicando notablemente. Todo ello afecta la confianza de las empresas en el mercado futuro y genera repercusiones retardadas sobre el empleo y sobre los ingresos de la población, las cuales no se pueden soslayar. En tercer lugar, se observa la convivencia de la excesiva capacidad productiva de las industrias tradicionales con la insuficiente oferta efectiva en los terrenos emergentes. La tarea de neutralizar el exceso de capacidad productiva es ardua, y en el curso de su eliminación está aumentando la presión social. Existen numerosas restricciones para el acceso a los ámbitos de las industrias emergentes y los servicios modernos, mientras que en algunos ámbitos con fuerte demanda se detecta una obvia insuficiencia de capacidad de oferta interna efectiva. En cuarto lugar, en lo que hace al "asalto de las plazas fuertes" en la reforma, están creciendo las dificultades para eliminar las barreras intangibles y romper las erigidas por los intereses. Con la reforma entrando en el periodo de "ataque de plazas fuertes" y en la zona de aguas profundas, su profundización incide en contradicciones más complejas y afecta intereses más enrevesados. La calidad de algunos planes de reforma sigue pendiente de elevación, y la puesta en práctica de ciertas medidas reformadoras no es completamente satisfactoria. Y, en quinto lugar, los riesgos latentes en algunos ámbitos requieren suma atención. El mercado inmobiliario se enfrenta a grandes incertidumbres en su reajuste y presenta una tendencia a la polarización; están saliendo a la luz incumplimientos crediticios en algunas empresas, y van en aumento los préstamos fallidos de los bancos, así que se están haciendo gradualmente patentes los riesgos económicos. Además, también surgen algunos problemas nuevos en las esferas de la agricultura, el comercio exterior, la sociedad, la vida del pueblo, la preservación ecoambiental y la seguridad en la producción. Frente a estas contradicciones y problemas, hemos de mantener la mente lúcida, hacernos más conscientes de las posibles crisis, tener un modo de pensar más fuerte relativo a los límites de alarma, plantar cara seriamente y esforzarnos por ofrecer soluciones.