SANTO DOMINGO, 12 may (Xinhua) -- El presidente de Francia, Francois Hollande, reconoció hoy en Haití la "deuda moral" que su país tiene con esta nación del Caribe, y que prometió resarcir con educación para el pueblo haitiano.
"Existe una deuda moral (con Haití)", dijo Hollande en un acto en la capital haitiana, donde realizó este martes una corta pero histórica visita oficial a la que fue la más importante colonia francesa en el continente americano.
Hollande, apostó a un mejor futuro en las relaciones con Haití, al que le prometió la ayuda de su país sobre todo en el área de la educación, en el que el gobierno francés invertirá alrededor de 56 millones de dólares en los próximos años.
"Se trata de un compromiso a largo plazo. Este es el símbolo más hermoso que podemos ofrecer", dijo el gobernante. "Francia apoyará el sistema educativo de Haití".
Hollande, el segundo mandatario francés que visita el país en 211 años y el primero que lo hace de manera oficial, arribó a alrededor de las 10:00 hora local (15:00 GMT) por el aeropuerto internacional Toussaint Louverture, donde fue recibido por su colega haitiano Michel Martelly, y por el primer ministro Evans Paul.
La visita del gobernante francés tuvo como telón de fondo el tema de la esclavitud en Haití, que a lo largo del siglo XVIII fue la más importante posesión francesa en el continente americano.
En 1791, el esclavo liberto Toussaint Louverture, cuyo nombre lleva la principal terminal aérea del país, encabezó una revuelta armada que culminaría doce años después, cuando el número de esclavos negros en la colonia francesa llegaba a 480.000 personas.
Mientras el mandatario francés realizaba su visita oficial, cientos de personas se manifestaban en Puerto Príncipe reclamando la reparación de su país al pago de millones de dólares que exigió al Estado haitiano para reconocer su libertad hace más de dos siglos.
La manifestación, convocada por grupos de izquierda y de la oposición radical haitiana para boicotear la visita de Hollande, se realizó en los alrededores de la casa de gobierno, donde tenía lugar el homenaje que el mandatario francés debía hacer a uno de los héroes de la independencia haitiana.
"Vengo en nombre del pueblo francés, que les envía un mensaje de amistad y solidaridad", dijo el mandatario francés durante una ceremonia en una emblemática plaza de Puerto Príncipe, en los alrededores de la casa de gobierno, dedicada al principal prócer de la independencia haitiana.
"No podemos cambiar la historia, pero sí podemos cambiar el futuro y permitir que los jóvenes haitianos tengan acceso al conocimiento y al éxito, ese es nuestro deber", agregó Hollande, que también llamó a Haití a realizar las elecciones que están programadas para este año, por el bien de su desarrollo.
Haití, que se liberó de Francia en 1804, tuvo que pagar durante más de un siglo el equivalente a 150 millones de francos oro (unos 22.000 millones de dólares en la actualidad) que las autoridades francesas reclamaron en 1825 para reconocer la independencia haitiana.
En el 2003, el entonces presidente de Haití, Jean Bertrand Aristide, lanzó una campaña para reclamar a Francia 21.000 millones de dólares como reparación por el "daño hecho" a su país con el reclamo de pago, pero la causa fue suspendida debido a la salida abrupta del poder del mandatario haitiano.
"Yo invito hoy a Francia a participar en la reparación de esta gran injusticia hecha a la juventud haitiana", dijo Martelly al tomar la palabra en el mismo lugar tras el discurso de Hollande, a quien pidió "implementar un plan Marshall (proyecto estadounidense para ayudar a la reconstrucción de Europa tras la II Guerra Mundial) para la educación en Haití".
El mandatario agregó que los "accidentes y errores de nuestro pasado no han impedido" a su país "tener un gran corazón y reconocer los valores" y superar el resentimiento, y aseguró que la vía que "tenemos por delante es más larga y más prometedora de la que ya hemos cruzado".
"¡Si no podemos cambiar la historia, que la historia nos cambie a nosotros!", sentenció Martelly.
Tras la ceremonia al aire libre, Hollande y Martelly pasaron a la casa de gobierno para suscribir varios acuerdos, entre ellos uno para la construcción de una escuela secundaria en la localidad de Côteaux, 224 kilómetros al oeste de Puerto Príncipe, en una iniciativa de la Asociación de Regiones Francesas a favor del pueblo haitiano.
Ambos países también suscribieron un acuerdo para la implementación de un plan de recuperación financiera de la Empresa Eléctrica de Haití, otro para mejorar modernizar el Instituto Nacional de Formación Profesional de Haití, y dos más sobre agua potable y aeronáutica civil.
Hollande llegó a la capital haitiana procedente de Cuba en el marco de una gira por la región que incluyó además a Saint Martin y Bartolomé, Martinica y Guadalupe, todos territorios franceses de ultramar en el Caribe oriental.
El gobernante ofreció un homenaje a los Padres Fundadores de Haití en el Museo del Panteón Nacional, y depositó una ofrenda floral ante la estatua del prócer de la independencia haitiana Toussaint Louverture, donde pronunció su discurso.
El gobernante francés sostuvo horas después un encuentro oficial con Martelly en la casa de gobierno y visitó el Hospital de la Universidad Estatal de Haití que construye Francia por un monto de 25 millones de dólares.
Finalmente, Hollande participó en un almuerzo oficial ofrecido por las autoridades haitianas y sostuvo un encuentro con la comunidad francesa radicada en Haití.