LA HABANA, 31 mar (Xinhua) -- Finalizó hoy en Cuba la temporada de invierno de cruceros, actividad que reportó el mayor número de atraques desde 2010 en la isla, considerada un paraíso para el turismo de sol y playa.

Durante la temporada invernal de cruceros que comenzó en noviembre pasado, solamente en la provincia oriental de Santiago de Cuba se reportaron 22 arribos de cruceros, y las autoridades locales del sector auguran que la venidera será superior.

De acuerdo con el Ministerio de Turismo (Mintur), la actividad de cruceros tuvo efectos positivos en la industria turística cubana, que hasta el pasado 22 de marzo reportó la llegada de un millón de vacacionistas foráneos en el año.

Esta cifra representó un incremento de 14 por ciento respecto al mismo período de 2014.

Otros de los factores decisivos para este aumento, han sido la consolidación de nuevas operaciones comerciales y la promoción en los diferentes mercados.

Conforme a lo planificado, Cuba recibió durante la temporada vacacional recién concluida 13 embarcaciones turísticas que efectuaron más de 200 escalas en distintas ciudades portuarias del país.

Durante el anterior período se registró la llegada de 8.085 visitantes en 12 cruceros, que efectuaron 82 escalas.

El cierre de la temporada estuvo marcado por la visita por primera vez del buque MS Serenissima a la bahía de Santiago de Cuba con paseantes de Finlandia.

Luego de un breve atraque en la rada santiaguera para que los viajeros recorrieran sitios de interés histórico, cultural y patrimonial de la ciudad, la embarcación partió con rumbo a República Dominicana.

El período invernal es el más favorable para el arribo de visitantes extranjeros mediante esta modalidad de turismo.

La posición geográfica de Cuba, las condiciones de sus puertos e instalaciones y sus reconocidas riquezas históricas y culturales, constituyen factores que favorecen el impulso de esta rama económica que aporta importantes ingresos al resto de las naciones caribeñas.

Como parte del programa de desarrollo del crucerismo en la ínsula, el Mintur proyectó la construcción de una moderna terminal en el puerto de Cienfuegos, segunda rada del país por su volumen de operaciones situada a 250 kilómetros al sureste de La Habana.

Las autoridades del sector se muestran optimistas con la reanimación de la actividad de cruceros en la mayor de las Antillas, que junto a China centró debates durante la convención mundial de cruceros.

El encuentro se realizó a mediados del mes en el Centro de Convenciones de la ciudad de Miami en el estado de Florida en el sureste de Estados Unidos.

El potencial turístico de Cuba y de China despertó el interés en la reunión de grandes navieras como Carnival, Norwegian (noruego) y Royal Caribbean Cruises (Cruceros Royal del Caribe).

La industria turística constituye un sector estratégico en el plan de reformas económicas emprendidas por el presidente cubano, Raúl Castro.

El mandatario ha propuesto diversificar y ampliar ofertas con la creación de campos de golf, marinas y nuevos desarrollos inmobiliarios, entre otros proyectos.

Esta esfera es la segunda fuente de ingresos de la isla, con aportaciones por unos 2.000 millones de dólares, sólo superada por la exportación de servicios médicos.

Cuba rebasó en 2014 por primera vez el umbral de los 3 millones de visitantes, al recibir a 3 millones 2.745 turistas, lo que significó un crecimiento de 5,3 por ciento respecto a 2013.

Cifras oficiales referidas al primer trimestre de 2015 revelan que Canadá se mantiene como el principal emisor de turistas a la isla, con un crecimiento de 12,6 por ciento en los últimos dos meses.

Le siguen Reino Unido (30,6), Alemania (23,3), Francia (22,8) e Italia (10,8).

Los vaticinios son muy alentadores también por el alza de mercados no tradicionales como el de China, que registró incrementos de 27 por ciento entre enero y marzo últimos, y pudiera crecer con el inicio de los vuelos directos entre Beijing (capital china) y La Habana.

Se espera, además, un aumento de visitantes estadounidenses, tras el comienzo del proceso para el restablecimiento de relaciones diplomáticas entre ambas naciones.

A mediados de enero pasado, Washington anunció una serie de medidas para flexibilizar el bloqueo económico contra Cuba, entre ellas más facilidades para los viajes estadounidenses a la isla.

Especialistas cubanos sostienen que la política de cerco priva a la nación caribeña de recibir al año más de 1.000 cruceros y una cifra aproximada de 1.200.000 viajeros, en tanto los ingresos por ese rubro pueden estar en el orden de los 125,3 millones de dólares anuales.

Hace 15 días, se reanudaron vuelos directos a La Habana desde las ciudades estadounidenses de Nueva Orleans en el estado de Luisiana (sureste) y de Cayo Hueso en Florida.

A su vez, aerolíneas de ese país como Delta Air Lines, United Airlines y JetBlue Airways han expresado su interés en comenzar a operar vuelos comerciales a la isla.