BUENOS AIRES, 15 may (Xinhua) -- El alcalde de la ciudad de Buenos Aires y ex presidente del club Boca Juniors, Mauricio Macri, dijo hoy que sintió "dolor, tristeza e impotencia" por los incidentes que causaron la suspensión del partido ante River Plate, por la Copa Libertadores.

"Sentí dolor, tristeza e impotencia. Trabajé muchos años para que nuestro club tenga una imagen internacional de respeto, de respeto, de reconocimiento", manifestó el también líder del Partido Propuesta Repúblicana (PRO), quien estuvo al frente de la institución deportiva en un periodo repleto de títulos de 1995 a 2007.

El partido se suspendió tras la agresión con gas pimienta de aficionados contra los futbolistas de River cometida el jueves por la noche, cuando pasaban por el túnel para ingresar al campo de juego, antes de comenzar el segundo tiempo.

El partido, disputado en "La Bombonera" estaba igualado 0-0 y a los "millonarios" le bastaba para clasificar a los cuartos de final, por el 1-0 logrado la semana anterior en el Monumental.

En declaraciones al diario "La Voz del Interior", de Córdoba, Macri dijo esperar que "por todo lo que se vivió a partir de este acto violento, la Justicia informe, en tiempo y forma, qué es lo que pasó".

El funcionario, opositor al gobierno nacional, defendió al presidente del club, Daniel Angelici, y al técnico de Boca, Rodolfo Arruabarrena, porque en sus declaraciones demostraron "humildad, sensatez y convencimiento sobre lo sucedido".

"Nadie se salva de todo lo que se vivió durante esas tres horas, fue todo muy triste. Tiene que ver con algo que está pasando con los valores de la Argentina. Estoy cada vez más convencido de que necesitamos un cambio. Lo que se vivió no es el camino que tiene que seguir nuestro país", acotó.

Macri, de 56 años, conduce la alcaldía de Buenos Aires desde diciembre de 2007 y es precandidato presidencial para las elecciones de este año.