Por Elena Chuquimarca
QUITO, febrero 28, 2019 (Xinhua) -- Imagen del 26 de febrero de 2019, de una artesanía elaborada con crin de caballo exhibida para su venta en el Centro Artesanal El Cedacero, en la parroquia Guangopolo, al este de Quito, capital de Ecuador. La crin del caballo da vida a las artesanías tradicionales y artísticas que enamoran a turistas en el poblado de Guangopolo, situado al este de Quito, la capital de Ecuador. La fibra natural que se obtiene de la crin del caballo es usada por la población para hacer cepillos, cuerdas, telas, así como utensilios de cocina, como el cedazo o coladera, la artesanía ancestral más representativa de Guangopolo. El cedazo posee un gran valor cultural y ha trascendido en sus 3.500 habitantes, ya que en la época colonial, con la aparición del caballo traído por los españoles a América, cambió la forma de confeccionar telas, utilizando el pelo de este animal. (Xinhua/Santiago Armas)
QUITO, 28 feb (Xinhua) -- La crin del caballo da vida a las artesanías tradicionales y artísticas que enamoran a turistas en el poblado de Guangopolo, situado al este de Quito, la capital de Ecuador.
La fibra natural que se obtiene de la crin del caballo es usada por la población para hacer cepillos, cuerdas, telas, así como utensilios de cocina, como el cedazo o coladera, la artesanía ancestral más representativa de Guangopolo.
El cedazo posee un gran valor cultural y ha trascendido en sus 3.500 habitantes, ya que en la época colonial, con la aparición del caballo traído por los españoles a América, cambió la forma de confeccionar telas, utilizando el pelo de este animal.
En este poblado, familias de artesanos mantienen viva esta tradición, por lo que se ha ganado la denominación de "Tierra mundial del cedazo", dijo a Xinhua Guido Paucar, socio del Centro Artesanal "El Cedacero", uno de los más grandes de la localidad.
"Me ha gustado la artesanía, no la he dejado nunca, me he dedicado casi al 100 por ciento solo a trabajar con la cola del caballo desde niño. Mis padres me han enseñado, incluso, he aprendido de mis bisabuelos (...), es un trabajo generacional", contó el artesano.
Según historiadores, el origen del cedazo se remonta a la época preincaica, en la que las comunidades ancestrales asentadas en la zona, llamada Quitu-Caras, usaban el "shusuna", un utensilio tejido con fibras de plantas que servía para cerner la chicha de maíz (bebida).
En Guangopolo, la confección y elaboración manual del cedazo sigue un proceso que demanda tiempo y mucha mano de obra de artesanos, entre ellos, de las tejedoras.
"Estamos retrocediendo a la historia, somos tejedores natos. Los cedazos son durables y ecológicos, el producto es degradable, resiste, no contamina los alimentos", señaló Paucar.
En épocas anteriores, la elaboración de cedazos constituyó una fuente de ingresos económicos para las familias dedicadas a esta actividad, pero con el aparecimiento de los derivados del petróleo, como el plástico, su demanda fue menor, y por ende su comercialización.
Por esta razón, los artesanos debieron evolucionar y buscar la forma de mantener esta artesanía a través de una diversificación en el uso.
Es así que, desde hace algunos años, los confeccionadores de cedazos adornan sus creaciones con bordados vistosos y usando coloridos decorados.
Con sus hábiles manos tejen figuras de indígenas relacionados con la cultura de la Sierra andina, paisajes, animales y frutas, entre otros.
Además, según Paucar, se ha innovado el uso de la crin del caballo en cordones, figurinas, aretes, pulseras y souvenir, entre otras cosas.
"Para el cedazo necesitamos cerda negra y larga (de la crin del caballo) para el tejido de entramado, y clasificamos cerda de colores, ya sea para bordados, cintillos y cinturones de uso decorativo", contó Paucar, tras indicar que los productos han traspasado las fronteras.
"Se han ido a otros países, Estados Unidos, Canadá, China, Europa", destacó al tiempo que relató que la materia prima proviene de haciendas de la Sierra ecuatoriana y de Colombia.
El artesano explicó que, tras la obtención de la crin en estado natural, se realiza su lavado con detergente por dos veces y luego se somete a un secado natural.
Posteriormente se realiza la denominada "parejada" que consiste en igualar las crines por tamaños "cortos y largos", para luego hacer un "chambreado", que consiste en peinar y eliminar residuos de eses u otras sustancias.
El proceso culmina con la elaboración del "guango" (atado) con un pedazo de tela, para realizar el "igualado" que es seleccionar las crines más larga de las pequeñas y así separarlas.
La coordinadora de "El Cedacero", Paula Andrade, afirmó a Xinhua que el trabajo de los artesanos es valorado por los turistas nacionales y extranjeros que llegan al centro artesanal donde se exhiben los productos.
"Vienen turistas, se enamoran de nuestra artesanía y son ellos quienes llevan para los diferentes lugares donde residen. Es importante que los mismos turistas sean los que vengan y se apropien de la artesanía que es la parte ancestral de Ecuador", dijo Andrade.
Los precios de las artesanías van desde los tres hasta los 40 dólares.
QUITO, febrero 28, 2019 (Xinhua) -- Imagen del 26 de febrero de 2019, de una artesana tejiendo una malla con la crin de caballo en un telar para la fabricación de cedazos y otras artesanías, en la parroquia Guangopolo, al este de Quito, capital de Ecuador. La crin del caballo da vida a las artesanías tradicionales y artísticas que enamoran a turistas en el poblado de Guangopolo, situado al este de Quito, la capital de Ecuador. La fibra natural que se obtiene de la crin del caballo es usada por la población para hacer cepillos, cuerdas, telas, así como utensilios de cocina, como el cedazo o coladera, la artesanía ancestral más representativa de Guangopolo. El cedazo posee un gran valor cultural y ha trascendido en sus 3.500 habitantes, ya que en la época colonial, con la aparición del caballo traído por los españoles a América, cambió la forma de confeccionar telas, utilizando el pelo de este animal. (Xinhua/Santiago Armas)
QUITO, febrero 28, 2019 (Xinhua) -- Imagen del 26 de febrero de 2019, de artesanías elaboradas con crin de caballo exhibidas para su venta en el Centro Artesanal El Cedacero, en la parroquia Guangopolo, al este de Quito, capital de Ecuador. La crin del caballo da vida a las artesanías tradicionales y artísticas que enamoran a turistas en el poblado de Guangopolo, situado al este de Quito, la capital de Ecuador. La fibra natural que se obtiene de la crin del caballo es usada por la población para hacer cepillos, cuerdas, telas, así como utensilios de cocina, como el cedazo o coladera, la artesanía ancestral más representativa de Guangopolo. El cedazo posee un gran valor cultural y ha trascendido en sus 3.500 habitantes, ya que en la época colonial, con la aparición del caballo traído por los españoles a América, cambió la forma de confeccionar telas, utilizando el pelo de este animal. (Xinhua/Santiago Armas)
QUITO, febrero 28, 2019 (Xinhua) -- Imagen del 26 de febrero de 2019, de un artesano tocando instrumentos andinos en el Centro Artesanal El Cedacero, en la parroquia Guangopolo, al este de Quito, capital de Ecuador. La crin del caballo da vida a las artesanías tradicionales y artísticas que enamoran a turistas en el poblado de Guangopolo, situado al este de Quito, la capital de Ecuador. La fibra natural que se obtiene de la crin del caballo es usada por la población para hacer cepillos, cuerdas, telas, así como utensilios de cocina, como el cedazo o coladera, la artesanía ancestral más representativa de Guangopolo. El cedazo posee un gran valor cultural y ha trascendido en sus 3.500 habitantes, ya que en la época colonial, con la aparición del caballo traído por los españoles a América, cambió la forma de confeccionar telas, utilizando el pelo de este animal. (Xinhua/Santiago Armas)
QUITO, febrero 28, 2019 (Xinhua) -- Imagen del 26 de febrero de 2019, de una artesana fabricando artesanías con crin de caballo, en el Centro Artesanal El Cedacero, en la parroquia Guangopolo, al este de Quito, capital de Ecuador. La crin del caballo da vida a las artesanías tradicionales y artísticas que enamoran a turistas en el poblado de Guangopolo, situado al este de Quito, la capital de Ecuador. La fibra natural que se obtiene de la crin del caballo es usada por la población para hacer cepillos, cuerdas, telas, así como utensilios de cocina, como el cedazo o coladera, la artesanía ancestral más representativa de Guangopolo. El cedazo posee un gran valor cultural y ha trascendido en sus 3.500 habitantes, ya que en la época colonial, con la aparición del caballo traído por los españoles a América, cambió la forma de confeccionar telas, utilizando el pelo de este animal. (Xinhua/Santiago Armas)
QUITO, febrero 28, 2019 (Xinhua) -- Imagen del 26 de febrero de 2019, de una artesana seleccionando crin de caballo para la elaboración de cedazos, en la parroquia Guangopolo, al este de Quito, capital de Ecuador. La crin del caballo da vida a las artesanías tradicionales y artísticas que enamoran a turistas en el poblado de Guangopolo, situado al este de Quito, la capital de Ecuador. La fibra natural que se obtiene de la crin del caballo es usada por la población para hacer cepillos, cuerdas, telas, así como utensilios de cocina, como el cedazo o coladera, la artesanía ancestral más representativa de Guangopolo. El cedazo posee un gran valor cultural y ha trascendido en sus 3.500 habitantes, ya que en la época colonial, con la aparición del caballo traído por los españoles a América, cambió la forma de confeccionar telas, utilizando el pelo de este animal. (Xinhua/Santiago Armas)
QUITO, febrero 28, 2019 (Xinhua) -- Imagen del 26 de febrero de 2019, de Guido Paucar, socio del Centro Artesanal El Cedacero, elaborando un cedazo en la parroquia Guangopolo, al este de Quito, capital de Ecuador. La crin del caballo da vida a las artesanías tradicionales y artísticas que enamoran a turistas en el poblado de Guangopolo, situado al este de Quito, la capital de Ecuador. La fibra natural que se obtiene de la crin del caballo es usada por la población para hacer cepillos, cuerdas, telas, así como utensilios de cocina, como el cedazo o coladera, la artesanía ancestral más representativa de Guangopolo. El cedazo posee un gran valor cultural y ha trascendido en sus 3.500 habitantes, ya que en la época colonial, con la aparición del caballo traído por los españoles a América, cambió la forma de confeccionar telas, utilizando el pelo de este animal. (Xinhua/Santiago Armas)
QUITO, febrero 28, 2019 (Xinhua) -- Imagen del 26 de febrero de 2019, de una artesana tejiendo una malla con la crin de caballo en un telar para la fabricación de cedazos y otras artesanías, en la parroquia Guangopolo, al este de Quito, capital de Ecuador. La crin del caballo da vida a las artesanías tradicionales y artísticas que enamoran a turistas en el poblado de Guangopolo, situado al este de Quito, la capital de Ecuador. La fibra natural que se obtiene de la crin del caballo es usada por la población para hacer cepillos, cuerdas, telas, así como utensilios de cocina, como el cedazo o coladera, la artesanía ancestral más representativa de Guangopolo. El cedazo posee un gran valor cultural y ha trascendido en sus 3.500 habitantes, ya que en la época colonial, con la aparición del caballo traído por los españoles a América, cambió la forma de confeccionar telas, utilizando el pelo de este animal. (Xinhua/Santiago Armas)
QUITO, febrero 28, 2019 (Xinhua) -- Imagen del 26 de febrero de 2019, de una artesana tejiendo una malla con la crin de caballo en un telar para la fabricación de cedazos y otras artesanías, en la parroquia Guangopolo, al este de Quito, capital de Ecuador. La crin del caballo da vida a las artesanías tradicionales y artísticas que enamoran a turistas en el poblado de Guangopolo, situado al este de Quito, la capital de Ecuador. La fibra natural que se obtiene de la crin del caballo es usada por la población para hacer cepillos, cuerdas, telas, así como utensilios de cocina, como el cedazo o coladera, la artesanía ancestral más representativa de Guangopolo. El cedazo posee un gran valor cultural y ha trascendido en sus 3.500 habitantes, ya que en la época colonial, con la aparición del caballo traído por los españoles a América, cambió la forma de confeccionar telas, utilizando el pelo de este animal. (Xinhua/Santiago Armas)