El 6 de febrero, el grupo houthi dio a conocer una "declaración constitucional" unilateral que disolvió el Parlamento y estableció un consejo presidencial para sustituir a la presidencia.

La acción unilateral fue rechazada por los partidos políticos de Yemen y condenada por los países árabes del Golfo. Más de una decena de países cerraron sus embajadas en Saná en protesta por la toma houthi de Saná y por razones de seguridad.

Arabia Saudí y los Emiratos Arabes Unidos han mudado sus embajadas a Adén para mostrar apoyo a Hadi, quien huyó a la ciudad portuaria sureña a fines de febrero para reanudar sus deberes presidenciales.

El grupo houthi chiita, también conocido como Ansarullah, está asentado en la provincia del extremo note, Saada. Extendió su influencia hacia el sur luego de firmar un acuerdo de paz y compartimiento de poder mediado por la ONU el 21 de septiembre de 2014, luego de enfrentamientos sangrientos de una semana.

El grupo batalló con el gobierno entre 2004 y 2010 a causa de su descontento por años de marginación.