Con motivo del comienzo del nuevo año en el calendario lunar, en todos los puntos de China se celebra esta fiesta.

Los artistas cantan y bailan al pie del Palacio de Potala en el Tíbet. Este año, el comienzo del año tibetano ha coincidido con el año nuevo chino.

En la cultura del Tíbet, 2015 es el año de la cabra, pero también es un año femenino, símbolo de paz, pues, tradicionalmente, se asigna un género a cada año.

Mientras tanto, una gala de año nuevo en movimiento es representada en un tren con destino a la región autónoma uygur de Xinjiang, en el noroeste de China.

Una pasajera dice :"Me ha pillado por sorpresa. Me encanta el ambiente festivo."

Otra expresa :"Estoy feliz aquí, a pesar de no estar con mi familia."

En un pueblo cerca de la ciudad oriental de Ningbo docenas de visitantes de han unido a las celebraciones, donde han podido hacer sus propios dulces caseros de gengibre y el niangao suena como la expresión llegar más alto cada año, un pastelito hecho con arroz glutinoso.

Los dragones, símbolo de la buena suerte, se pueden ver por todas partes. La danza del dragón es imprescindible en todas las celebraciones de año nuevo.

Finalmente, un calígrafo en la ciudad de Nanjing ha marcado el nuevo año con cien sellos con diferentes representaciones de la cabra y los ha impregnado en papel.

Los sellos están inspirados en dibujos procedentes de distintas dinastías chinas a lo largo de los siglos. (Fuente：CCTV.com)