BAGHDAD, July 18 (Xinhua) -- El grupo militante, Estado Islámico asumió respondabilidad este sábado por el ataque suicida con un camión a un mercado concurrido en la provincia Diyala en el este de Iraq.

En un comunicado en línea, el grupo dijo que el ataque lo llevó a cabo un militante que llevo su camión bomba con tres toneladas de explosivos y lo detonó entre milicias shíitas cerca de la mesquita de al-Rasoul al-Aazam en el pueblo de Khan bani Saad en la provincia Diyala.

El camión bomba llegó en venganza por ataques llevados a cabo anteriormente por fuerzas shiítas y fuerzas aéreas en el pueblo ocupado por el EI, Hawijh, en la parte occidental de la provincia rica en petróleo, Kirkuk, en el norte de Iraq, dice el comunicado, cuya autenticidad no ha podido ser verificado de forma independiente.

Hasta hace poco, las autoridades de Diyala dijeron que 97 personas habían muerto, 133 heridas y otras 23 personas desaparecidas por la fuerte explosión.

La explosión aplanó más de 35 tiendas y dejó otras 40 muy dañadas, mientras docenas de puestos desaparecieron o se destruyeron en el gran radio alrededor de la explosión, dijo una fuente a Xinhua bajo la condición de anonimato.

La gran explosión también dejó unos 45 vehículos civiles calcinados y docenas dañados, dijo la fuente, quien también añadió que muchos de los cuerpos de las víctimas estaba calcinados o cortados en pequeños pedazos como resultado de la explosión.

Las víctimas, de mayoría shiíta, se habían reunido en el mercado para hacer compras para la festividad de Eid al-Fitr que marca el final del mes sagrado de Ramadan, el cual terminó el viernes para los shiítas iraquíes y un día antes para los sunítas.

Las autoridades declararon tres días de luto y ordenaron que todos los parques y lugares de entretenimiento se cerraran por el resto de la festividad, mientras medidas de seguridad se intensifican a los largo de la provincia para prevenir futuros ataques.

A principios de año, las autoridades de Diyala anunciaron que la provincia estaba libre de militantes del EI después de ofensivas importantes contra ellos, pero al parecer algunos militantes del EI están en escondites y atacado esporádicamente contras las fuerzas de seguridad y milicias aliadas con los shiítas.

La violencia y las tensiones de sectas se han incrementado recientemente entre las comunidades sunítas y shiítas en la provincia volátil de Diyala, con frecuentes matanzas en represalia y ocasionales ataques sangrientos llevados a cabo por grupos extremistas.

La provincia de Diyala, que se extiende por los bordes orientales de Baghdad hasta la frontera con Irán, ha sido un bastión de grupos militantes de al-Qaeda y un semillero de insurgencia y violencia sectaria por mucho tiempo, desde la invasión dirigida por EEUU en 2003.

La situación de seguridad en Iraq se ha deteriorado drásticamente desde junio de 2014, cuando enfrentamientos sangrientos ocurrieron entre fuerzas de seguridad y militantes del EI.