NACIONES UNIDAS, 18 jun (Xinhua) -- La Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) advirtió hoy de "un máximo histórico" de cerca de 60 millones de personas que han sido obligadas a dejar sus lugares de origen para buscar seguridad como refugiados en medio de un aumento de las guerras y los conflictos en el mundo.
De acuerdo con datos recabados por Acnur en el transcurso de 2014, el número de personas desplazadas por la fuerza durante ese año aumentó a la asombrosa cifra de 59,5 millones de personas, en comparación con los 51,2 millones de personas del año anterior.
Las cifras, recabadas por la agencia de la ONU para su más reciente informe "Tendencias Mundiales: El mundo en guerra", indican que uno de cada 122 seres humanos es actualmente un refugiado, un desplazado interno o un solicitante de asilo. Si se tratara de la población de un país, señaló Acnur, sería el 24º más poblado del mundo.
"Estamos atestiguando un cambio de paradigma, un desplazamiento descontrolado hacia una era en la que la magnitud de los desplazados por la fuerza a nivel mundial, así como la respuesta requerida, claramente empequeñecen cualquier cosa vista antes", indicó el alto comisionado de la ONU para los Refugiados, Antonio Guterres, en un informe de prensa emitido hoy con anterioridad con motivo de la presentación del informe.
El informe se produce la víspera del Día Mundial de los Refugiados, el cual se celebra el 20 de junio.
"Resulta aterrador que por un lado haya cada vez más impunidad para quienes inician los conflictos y que por otro lado exista una aparente total incapacidad de la comunidad internacional para trabajar junta a fin de detener las guerras y consolidar y conservar la paz", dijo el alto comisionado.
En un análisis detallado que explora la gama de conflictos que han dado paso a la actual diáspora masiva de refugiados, el informe de Acnur señala que en los últimos cinco años, al menos 15 conflictos han comenzado o se han reactivado.
En Africa, los estallidos de hostilidades, muchos de los cuales son de naturaleza sectaria, han consumido ocho países, incluyendo a Cote d'Ivoire, República Centroafricana, Libia, Mali, el noreste de Nigeria, República Democrática del Congo, Sudán del Sur y, más recientemente, Burundi, agregó el informe.
En Medio Oriente, Siria, Irak y Yemen siguen en llamas y en Europa, Ucrania ha generado una crisis de desplazamiento de más de 1,3 millones de personas, principalmente en las provincias orientales de Donetsk, Lugansk y Kharkivska, se indicó en el informe.
Por otra parte, en Asia, las tensiones sin resolver en Kirguizistán y en varias áreas de Myanmar y Pakistán siguen forzando a las personas a cruzar las fronteras de estos países, añadió el informe.
Esta infinidad de crisis y conflictos, señala el informe de la ONU, también ha provocado una peligrosa y cada vez mas grave tendencia en la migración irregular en la que millones de refugiados de todo el mundo son empujados hacia una incómoda y letal dinámica con traficantes de personas en su búsqueda de un pasaje hacia la seguridad.
Los cruces desde Medio Oriente y el norte de Africa hacia Europa se han incrementado y las cifras oficiales más recientes indican que para el 8 de junio de este año, un total de 103.000 refugiados y migrantes habían llegado a Europa: 54.000 a Italia, 48.000 a Grecia, 91 a Malta y 920 a España.
Esto incluye las cifras récord de refugiados que llegan a diario a las islas griegas. En tanto, las cifras generales de desplazamientos forzados en Europa para el periodo de 2014 ascendió a la abrumadora cantidad de 6,7 millones de personas.
Del otro lado del mundo, la situación de los refugiados en Asia es igualmente trágica. En su informe, Acnur explica que Asia ha sido durante mucho tiempo una de las regiones que más desplazamientos produce en el mundo y que en el 2014, las cifras de desplazados internos en todo el continente se incrementaron en 31 por ciento para llegar a nueve millones de personas.
La actual y difícil situación de los rohingya del estado de Rakhine en Myanmar y de las regiones de Kachin y de Shan del Norte ha producido igualmente una crisis de refugiados marítimos.
El año pasado, el número de personas que salieron de Myanmar y Bangladesh por barco llegó a alrededor de 53.000. Se sabe que 920 migrantes perecieron en la bahía de Bengala entre septiembre de 2014 y marzo de este año.
En este contexto, las alarmantes cifras que detallan la situación mundial de los refugiados, dadas a conocer hoy por Acnur, se complican por la desalentadora confirmación de la agencia de que más de la mitad de los refugiados del mundo son niños.
"Con una enorme escasez de fondos y grandes vacíos en el régimen global de protección a las víctimas de la guerra, las personas necesitadas de compasión, ayuda y refugio están siendo abandonadas", dijo Guterres.
"Para una era de desplazamientos masivos sin precedentes necesitamos una respuesta humanitaria sin precedentes y un renovado compromiso global con la tolerancia y la protección a las personas que huyen del conflicto y la persecución", agregó.
Acnur fue establecida el 14 de diciembre de 1950 por la Asamblea General de la ONU. La agencia tiene el mandato de conducir y coordinar las acciones internacionales para proteger a los refugiados y resolver los problemas de los refugiados en el mundo.
Su propósito primario es salvaguardar los derechos y el bienestar de los refugiados. Lucha para garantizar que todos puedan ejercer el derecho a buscar asilo y encontrar un refugio seguro en otro país, con la opción de regresar voluntariamente a su país, integrase a nivel local o reubicarse en un tercer país. También tiene el mandato de ayudar a los apátridas.
Desde 1950, la agencia de la ONU ha ayudado a decenas de millones de personas a reiniciar sus vidas. En la actualidad cuenta con 9.300 elementos de personal en 123 países que continúan ayudando y protegiendo a millones de refugiados, desplazados, apátridas y personas que regresan a su país.