SANTIAGO, 27 may (Xinhua) -- Por segundo año consecutivo, las inversiones en el extranjero de países de América Latina y el Caribe cayeron sustancialmente, registrando 29,162 millones de dólares en 2014, informó hoy la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).

Esa disminución representó un retroceso del 12% en comparación al 2013.

Entre los años 2010 y 2012, esos flujos alcanzaron los 46,800 millones de dólares en promedio.

Según la organización de Naciones Unidas, las inversiones latinoamericanas en el extranjero "siempre han sido muy volátiles, ya que se concentran en un número reducido de países y de grandes empresas translatinas, por lo que pueden variar si se produce alguna adquisición o proyecto de gran envergadura".

Señala que los descensos de los años 2013 y 2014 se explican por los mismos factores que han afectado los flujos de Inversión Extranjera Directa (IED) en la región, que ha vivido una desaceleración en sus economías.

La mayoría de las inversiones de las economías latinoamericanas siguen materilizándose en la propia América Latina y el Caribe por lo que, cualquier empeoramiento de las perspectivas para invertir, también afectan las salidas de IED.

CEPAL apunta que "muchas de las grandes empresas translatinas están en los sectores extractivos de minerales, que están reduciendo su inversión de capital en respuesta al descenso de los precios de los productos básicos" .

Esas entidades proceden básicamente de cuatro naciones: Brasil, Chile, Colombia y México, los cuales representaron en la pasada década el 90% del total de la inversión latinoamericana en el extranjero. La disminución de los flujos de salida de capitales se concentró en Colombia y México.

Brasil es la nación latinoamericana con mayor experiencia en invertir en el extranjero, pero ha registrado por cuatro años consecutivos un saldo negativo en las salidas de IED, según ha indicado el Fondo Monetario Internacional.

En 2014, las entidades brasileñas invirtieron fuera del país 19,556 millones de dólares en aportaciones de capital, pero recibieron, al mismo tiempo, 23,096 millones de dólares en préstamos netos de filiales en otros países, con un flujo negativo de 3,540 millones de dólares, cifra similar al año anteriior.

Por otra parte, las inversiones en el exterior de Argentina el pasado año ascendieron a 2,117 millones de dólares, el doble que en el 2013, mientras las de Venezuela fueron de 1,024 millones.

Los flujos de salida de IED de otras economías de la región son muy modestas, como el caso de Centroamérica.

En 2014, Costa Rica registró salidas por 218 millones de dólares, mientras algunas empresas de Panamá tienen participación mayoritaria en el Banco de la Producción de Ecuador por 130 millones.

Por otro lado, el Banco Ficohsa, de Honduras, compró los activos del Citibank en Guatemala, tras adquirir ese año los activos de la misma entidad en su país.