LA HABANA, 12 abr (Xinhua) -- Los cubanos esperan una mejora en las relaciones entre la isla y Estados Unidos, luego de la reunión sostenida la víspera en Panamá entre el presidente de Cuba, Raúl Castro, y su par estadounidense Barack Obama.
"Ha sido algo histórico", dijo a Xinhua el ex militar Felipe Meneses, quien calificó así la reunión entre Castro y Obama realizada en el marco de la VII Cumbre de Las Américas que concluyó el sábado pasado en la capital panameña.
Sostuvo que el país necesita de una relación "normal" con Estados Unidos, porque "durante más de 50 años nos ha causado muchas penurias",
"Tengo esperanzas, pero también un poco de suspicacia, porque han sido muchos años de hostilidad", afirmó el ex oficial en referencia al bloqueo económico, financiero y comercial que mantiene Washington contra la isla desde hace más de medio siglo.
El encuentro entre Castro y Obama fue el primero desde que el ex presidente de Estados Unidos, Dwight Eisenhower (1953-1961) se sentó con su homólogo cubano Fulgencio Batista (1940-1944) en1958, antes del triunfo de la revolución que encabezó Fidel Castro.
La reunión entre Raúl Castro y Obama es resultado del anuncio que ambos hicieron el 17 de diciembre pasado de manera simultánea, para informar sobre el inicio de un proceso de restablecimiento de relaciones diplomáticas, rotas por Washington en 1960.
Desde diciembre de 2014, diplomáticos de ambos países han sostenido varias rondas de conversaciones para avanzar en un proceso cuya meta más inmediata es la reapertura de las respectivas embajadas en Las Habana y Washington.
Por su parte, la estudiante universitaria Yohanna García, dijo sentirse feliz por las oportunidades que se le abren a la isla.
"Somos dos países que históricamente tuvimos una relación muy estrecha, y si eso se recupera puede ser algo muy bueno para la economía nacional", indicó la estudiante de medicina.
Dijo que sus abuelos le han contado que industrias estadounidenses probaban sus productos en Cuba antes de lanzarlos al mercado allá: "Imagínese lo que eso sería hoy para un país que trata de levantar su economía".
A su vez, Alberto Paredes, propietario de una pequeña cafetería en la ciudad de La Habana (capital), aseveró que "lo más importante es que Estados Unidos respete la soberanía del país y termine con tantos años de inútil hostilidad".
"Tenemos sistemas políticos diferentes, pero eso no quiere decir que haya que vivir en medio de un constante enfrentamiento, porque la Guerra Fría terminó y lo que necesitamos es vivir con vecinos civilizados, como ha dicho Raúl (Castro)", señaló Paredes.
Este domingo también se habló de política en el Parque Central de la capital cubana, sede habitual de discusiones deportivas, y no sólo acerca del triunfo anoche del equipo de Ciego de Avila que se proclamó campeón del torneo nacional de béisbol.
"Tienen que levantar el bloqueo y permitir que los peloteros cubanos puedan jugar en Estados Unidos", pidió Juan Macías, un obrero que sueña con ver a los cubanos jugando en las Grandes Ligas, algo que ahora impiden las regulaciones de ambos países.
Para la jubilada Norma López, la nueva relación bilateral debe permitir a Cuba "dedicarse en paz a buscar su propio desarrollo, sin el temor permanente de una agresión por la hostilidad norteamericana".
"Que nos dejen en paz para vivir tranquilos como hemos escogido", dijo López.