MEXICO, 26 feb (Xinhua) -- Los sistemas de transporte por teleférico para trasladar a personas en condiciones de seguridad y comodidad en ambientes urbanos o en escenarios turísticos de invierno o de verano han logrado avances destacados en diversas partes del mundo.

Desde que surgió a principios del siglo XX este sistema de transporte de personas y productos, en varios países se ofrece el servicio especializado, ecológico y cómodo basado en fuertes medidas de seguridad.

CHINA

El teleférico de Tianmenshan tiene una longitud de 7.455 metros y una altura de 1.279 metros. Se encuentra en la provincia de Hunan. Es uno de los teleféricos montañosos más grandes del mundo y conecta al centro de la ciudad de Zhangjiajie con los jardines del cielo de Tianmenshan en un lapso de 28 minutos.

En la Montaña Amarilla, en la provincia de Anhui, se encuentran cuatro teleféricos, que empezaron a ofrecer servicio en 1986. La impresionante vista del sitio incluido en el Patrimonio de la Humanidad de la Unesco puede disfrutarse a una altura de 1.800 metros.

BOLIVIA

En Bolivia opera desde mayo de 2014 el teleférico urbano más largo del mundo con una longitud de 36 kilómetros (km). Une a las ciudades de El Alto y La Paz para conformar la red de transporte que será ampliada en una segunda fase con seis nuevas líneas para integrar a barrios periféricos en la urbe paceña.

La segunda fase está garantizada y comenzará en marzo, lo manifestó el presidente Evo Morales, quien promulgó en enero pasado la ley que garantiza la inversión de 450 millones de dólares en el proyecto. El sistema tendrá las líneas azul, naranja, celeste, morada, marengo y blanco, para tener los colores de la Wiphala, segunda bandera símbolo patrio nacional.

La primera fase con tres líneas, rojo amarillo y verde (colores de la bandera boliviana) se entregó por etapas: una primera en mayo, la segunda en septiembre y la tercera en diciembre de 2014.

El proyecto del teleférico representó un costo de 234 millones de dólares y cuenta con 427 cabinas, con capacidad de transporte promedio 20.000 pasajeros cada hora, a lo largo de unos 36 kilómetros de trayecto en 11 estaciones que están instaladas entre La Paz y El Alto.

El moderno sistema de transporte por cable fue construido en 17 meses por la austríaca Dopperlmayr, empresa que hizo un trabajo similar en 88 países para habilitar 14.400 torres de transporte por teleférico.

VENEZUELA

Los teleféricos en Venezuela se han convertido en parte de la vida diaria de habitantes y visitantes foráneos, quienes aprecian estas maravillas de la ingeniería moderna.

En el país existen cinco sistemas de este tipo, la mayoría concentrada en la capital suramericana, los cuales con el paso del tiempo se han convertido en símbolo característico de Caracas.

El más emblemático de ellos es el Teleférico Warairarepano, bautizado así por el fallecido líder Hugo Chávez en 2007, luego de pasar a manos del Estado bolivariano tras incurrir en incumplimientos del contrato de la concesión la empresa privada a cargo del también conocido Teleférico del Avila.

En la actualidad el sistema cuenta con más de 87 cabinas con capacidad para trasladar a ocho personas cada uno en un recorrido de 3,5 km de distancia, desde la estación principal hasta la cima de la montaña El Ávila en el noroeste de Caracas, en un tiempo estimado de 15 minutos.

Con el fin de lograr la interconexión de los tres destinos recreativos más importantes de Venezuela (playa, montaña y ciudad), a finales del 2013 comenzaron las obras del Sistema Teleférico Warairarepano-Macuto, ubicado en el estado Vargas.

La fecha prevista para su inauguración es en julio de 2017, luego de casi 50 años de olvido. Dispondrá de 50 cabinas con capacidad para 8 personas cada una y hará un tiempo de traslado de 45 minutos desde el centro de Caracas hasta Macuto.

CHILE

El gobierno de la presidenta Michelle Bachelet ha destinado 4.100 millones de dólares a inversiones en la infraestructura de la conectividad, que incluye a los teleféricos, con el fin de mejorar la vida de los chilenos en su desplazamiento.

Santiago, Valparaíso, Antofagasta e Iquique, ciudades todas rodeadas por montañas, contarán con nuevos teleféricos para dar respuesta a su crecimiento demográfico y a la necesidad de aumentar su conectividad, tanto en su interior, como en su interrelación con el resto del territorio.

En la capital chilena, tras cinco años fuera de servicio, se trabaja para poner en marcha el que fuera el primer teleférico del país con fines turísticos. Se encuentra en el Parque Metropolitano, ubicado en el cerro San Cristóbal, de 4,8 km, desde donde se divisa gran parte de la urbe de más de 6 millones de habitantes.

Además, se aprobó la construcción del Teleférico Bicentenario, que unirá a los municipios de Providencia y Huechuraba en sólo 12 minutos. Su costo está calculado en 76 millones de dólares, con un trazado de 3,4 kilómetros. Permitirá el transporte de 6.000 personas por hora y estará en operación en 2018.

En el puerto de Valparaíso se ha proyectado un teleférico que mejorará la conectividad de los sectores altos de ese municipio, donde vive gran parte de sus 900,000 habitantes, y cuyo costo será de 368 millones de dólares.

Contará con seis estaciones, una capacidad de traslado de 1.000 personas por hora y cabinas que estarían diseñadas para unas 12 personas, además, se conectará con el Metro de la ciudad.

En Antofagasta, capital de una de las principales regiones mineras del país, se invertirán 275 millones de dólares para construir un teleférico de 13 kilómetros, que será conocido como Metrocable.

Por último, la norteña Iquique contará con su primer teleférico de 3,3 kilómetros, que unirá al municipio de Alto Hospicio con el centro de la ciudad, con una inversión de 45 millones de dólares.

BRASIL

Los teleféricos se han convertido en los últimos años en una nueva forma de transporte de pasajeros en Brasil, con su llegada en las famosas "favelas" y que han facilitado los desplazamientos a miles de personas a la hora de llegar o salir de casa.

El primer teleférico que se instaló en Brasil fue en el famoso Pan de Azúcar de Río de Janeiro, una de las atracciones turísticas de la llamada "Ciudad Maravillosa".

Inaugurado en 1912, el teleférico es conocido popularmente como "Bondinho" porque sus cabinas son muy parecidas a los primeros tranvías que llegaron a Río de Janeiro a inicios del siglo XX. Fue el tercer teleférico del mundo, tras uno en España y otro en Suiza.

Actualmente, hay varios teleféricos en marcha en Brasil. La mayoría están en puntos turísticos, como el de Laranjeiras, en Balneario Camboriú (estado de Santa Catarina, sur del país), el único del mundo que une a dos playas.

En 2011 los teleféricos ganaron una nueva dimensión en Brasil al inaugurarse el primer teleférico destinado al transporte masivo de personas. Se trata del Teleférico do Alemao, ubicado en el Complexo de Favelas do Alemao, en la zona norte de Río de Janeiro.

El gran uso y funcionamiento que tuvo llevó a las autoridades a construir otro, en la favela de Providencia, la primera favela que hubo en Río de Janeiro. El teleférico fue inaugurado en julio de 2014. Actualmente, se desarrolla el proyecto para instalar un teleférico en Rocinha, en la zona sur de Río de Janeiro y que es la mayor favela de Brasil.

PERU

La propuesta de teleféricos se ha intensificado en el país. La más visible es el denominado Teleférico de Kuélap, con un recorrido de cuatro kilómetros. Se trata de una iniciativa cuya construcción debe iniciarse en el primer semestre de este año a un costo de 17 millones de dólares. Kuélap es un centro arqueológico de la cultura preinca Chachapoyas, en la ceja de selva de la región Amazonas (norte).

Otro proyecto es el teleférico de Choquequirao, en los límites de las sur andinas regiones de Apurímac y Cusco, a 1.400 metros de altitud, que cubrirá una distancia de cinco kilómetros.

El tercer teleférico sería el de Lima, que operaría entre el Parque de la Gran Muralla, a espaldas del Centro Histórico, hasta el Cerro San Cristóbal, en una ruta de poco más de un kilómetro a cubrir en un tiempo de ocho minutos; aún sin fecha de ejecución.

MEXICO

Existen teleféricos en varios estados de México, pero son considerados turísticos, como es el de Zacatecas, en el estado del mismo nombre, y el más longevo inaugurado en 1979.

Otros más se ubican en Taxco, en el estado de Guerrero; el de Barrancas del Cobre, en Chihuahua; en Durango, en el estado del mismo nombre; uno más en el estado de Guanajuato y otro en Guadalajara, en el occidental estado de Jalisco, o el de García, en el estado de Nuevo León. Todos ellos con extensión de entre los 600 y 2.800 metros.

En estudio están los teleféricos de Orizaba, en el estado de Veracruz o el de Puebla, en el estado del mismo nombre.

El Metrocable de Ecatepec, en el central estado de México, es el más adelantado y según sus constructores tiene un avance de obra de 30 por ciento. De acuerdo con los planes se busca que entre en operación a fines de diciembre de 2015.

COLOMBIA

En 1955 fue inaugurado en Bogotá el primer sistema teleférico que transportaría personas en el país; el cerro tutelar de Monserrate, lugar de peregrinación de feligreses fue el lugar en donde se llevó a cabo este proyecto turístico que se ha mantenido hasta hoy.

El teleférico de Monserrate es de modalidad bicable con dos cabinas para transportar 40 personas cada una que recorren 880 metros en cuatro minutos y que va de 2.692 a 3.152 metros sobre el nivel del mar.

Es en la ciudad de Medellín donde el teleférico adquiere las dimensiones que le darán realce internacional a esta ciudad, la primera del mundo en implementar el sistema teleférico como medio de transporte público de tiempo completo.

Conocido como Metrocable, el teleférico de Medellín está compuesto por tres líneas que unidas tienen una extensión total de 9.37 kilómetros. Sus ocho estaciones han aportado al desarrollo de una ciudad con difíciles características tanto topográficas como sociales.

El Metrocable de Medellín proyecta en la actualidad la construcción de dos líneas nuevas que también estarán conectadas con el metro para garantizar la adecuada movilidad de los cerca de 4 millones de habitantes con los que cuenta la ciudad.

El sistema que tuvo un costo de 34 millones de dólares moviliza cerca de 700.000 personas diariamente.

Como se puede observar, el sistema de teleféricos en América Latina está consolidado y sigue en crecimiento, lo que hace vislumbrar un gran desarrollo de esta tecnología amigable con el medio ambiente.