CARACAS, 13 feb (Xinhua) -- El presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, acusó al gobierno de Estados Unidos de financiar el intento de "golpe de Estado" desarticulado por el Ejecutivo venezolano este jueves y denunciado por el presidente venezolano, Nicolás Maduro.
En un programa especial transmitido esta noche por la estatal Venezolana de Televisión, el dirigente político aseguró disponer de pruebas que confirman esta aseveración y cómo funcionarios de la sede diplomática norteamericana en Caracas entregaron visas a una decena de oficiales de la Aviación Militar implicados en la intentona golpista.
Cabello además señaló que una funcionaria de la embajada de Canadá en esta nación suramericana visitó en días recientes el aeropuerto Arturo Michelena, ubicado en el central estado Carabobo, para averiguar cuáles eran las capacidades de respuesta de este recinto en "casos especiales".
Una pesquisa que, a su juicio, resulta "muy sospechosa", mientras que, agregó, las investigaciones en curso han arrojado nuevas evidencias, las cuales también ubican a funcionarios de la embajada británica como colaboradores en la planificación de esta nueva maniobra.
"El imperialismo norteamericano dice que no tiene nada que ver con el intento de golpe de Estado, sin embargo aquí está la visa otorgada el 3 de febrero de 2015 a Luis Hernando Lugo Calderón (uno de los 10 oficiales detenidos), quien en su declaración explica como es el contacto", aseveró Cabello.
El testimonio refuta las declaraciones pronunciadas esta jornada por la portavoz del Departamento de Estado norteamericano, Jen Psaki, al calificar de "ridículas" las acusaciones del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, sobre el papel de Washington en la organización de un plan que pretendía asesinar al mandatario y promover una intervención militar extranjera.
Más adelante el también primer vicepresidente de Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), informó que actualmente 10 de los 13 efectivos militares vinculados a la también conocida "Operación Jericó", han sido capturados.
Entre ellos señaló a Henry Salazar, Carlos Esquera, Jesús Salazar Moncada, Peter Alexander Moreno Guevara y Ricardo José Antich, encargado de los contactos con la embajada de Estados Unidos para tramitar el asilo político en caso de ser necesario.
Otros implicados son: Héctor Noguera Figueroa, José Suárez, Maximiliano Hernández Vásquez, César Pérez, Wilfredo Castillo, Miguel Salazar Molina, Jafre de Jesús Pineda Trejo, Jesús Garzón Usuna, Luis Lugo Calderón, Luis Colmenares, Eduardo Figueroa Marchena (prófugo en Panamá) y un hombre conocido como "El Taxista".
"Es una investigación seria que estamos haciendo y en esa investigación no están solos los tenientes, primeros tenientes y capitanes. Hay fuerzas políticas involucradas que hicieron de la política un basurero", afirmó Cabello.
Durante la transmisión televisiva, el dirigente político también mostró unos segundos de un material audiovisual que sería difundido por un canal norteamericano por intermedio de la periodista venezolana Patricia Poleo, residenciada en Miami y relacionada con elementos de extrema derecha radicados en esa ciudad estadounidense.
En el video, proporcionado por un oficial cuya identidad no fue revelada, se observa cómo seis personas (tres civiles y tres militares) se vestían con uniformes y pasamontañas de los diferentes componentes de las fuerzas armadas venezolanas.
El objetivo era registrar una declaración donde los participantes anunciarían al mundo sobre un supuesto alzamiento de los militares contra el gobierno de Maduro.
"Ellos estaban preparando este video. Grabaron el video. Está la esposa del teniente Henry Javier Salazar Moncada (Estefanía Andreína Carrillo Torres). Ella se llevó la cinta de 8 minutos 32 segundos. Tenemos computadoras, tablas, teléfonos, y allí están todos los vínculos, las llamadas que hicieron durante toda la preparación", detalló Cabello.
Por su parte, el miembro de la dirección nacional del PSUV, Jorge Rodríguez, indicó que varios de los imputados señalan al diputado opositor Julio Borges como parte de las pretensiones subversivas denominadas "Golpe azul".
Asimismo adelantó que el Ejecutivo dispone de un conjunto de pruebas que oportunamente serán develadas sobre la magnitud del plan, frustrado gracias a la colaboración de jóvenes oficiales bolivarianos y al trabajo de los cuerpos de seguridad del Estado.
"Cuando este tipo de denuncias se hacen públicas detienen los hechos terribles, como este que incluía a un grupo de militares y un sobrevuelo que ocurriría desde un punto distinto a la frontera venezolana para atentar contra la vida del presidente de la República, justamente cuando teníamos la marcha del Día de la Juventud, el 12 de febrero", reflexionó Rodríguez.
A su vez el dirigente político socialista criticó las declaraciones de la vocera norteamericana, quien además admitió que la política adoptada por la Casa Blanca es no apoyar "transiciones violentas sino pacíficas".
"¿En qué parte de la Constitución Bolivariana de Venezuela se señala que las transiciones existen? No existen ni pacíficas ni violentas. En Venezuela existen elecciones libres, democráticas y la única opción para optar cargos de elección popular es que una persona resulte triunfadora en un evento electoral", recordó.
Más temprano, la canciller venezolana Delcy Rodríguez, advirtió que estas acciones tienen como fin "la intervención internacional como hemos venido reiterando y denunciando últimamente".
La titular de Exteriores anunció que ante la gravedad de los sucesos, decidió suspender su actual gira internacional por países de Europa y regresar a Caracas en las próximas horas para acompañar al gobierno y pueblo venezolanos en su lucha por preservar la paz en la nación.
Durante un contacto telefónico con el canal multiestatal Telesur, Rodríguez señaló que "se ciernen amenazas serias y graves contra la estabilidad política y democrática no sólo para Venezuela, sino las consecuencias terribles que esto podría tener para la estabilidad regional".
Finalmente la ministra manifestó que los gobiernos extranjeros recibirán información detallada del suceso "para que puedan verificar que en efecto hubo un intento de magnicidio y de golpe de Estado; que hubiese tenido consecuencias trágicas para la estabilidad nacional".
La noche de este jueves, el mandatario venezolano, Nicolás Maduro, reveló que cuerpos de seguridad locales frustraron esta maniobra, la cual contemplaba el magnicidio y bombardeos a objetivos claves como el Palacio Presidencial de Miraflores, los ministerio de Defensa y de Interior, el Consejo Nacional Electoral, la Asamblea Nacional y el canal multiestatal Telesur.
Con ello pretendían además convocar a las fuerzas armadas a una insubordinación general e iniciar una insurrección militar que justificara la intervención de organismos extranjeros.