LA PAZ, 13 feb (Xinhua) -- El presidente boliviano Evo Morales, ministros, asambleístas y dirigentes de movimientos sociales inauguraron hoy el carnaval en Bolivia con un ritual indígena de agradecimiento a la "Pachamama" (Madre Tierra), bailes y música en La Paz.

Unos sacerdotes aymaras, ataviados con ponchos multicolores y "lluchus" (gorros tejidos de lana) y las "mama tallas" (mujeres sabias) realizaron una inusual ceremonia en el recibidor de Palacio Quemado, que fue asaltado y calcinado en 1875, durante el gobierno del presidente Tomás Frías.

Morales exhortó a la ciudadanía a divertirse sanamente y con mucha prudencia para evitar situaciones lamentables.

Ironizó al señalar que días atrás hizo muchos ejercicios como preparación, esta vez no para jugar fútbol, sino para bailar hasta el cansancio.

Recordó que el año pasado no hubo una fiesta porque en la zona este de Bolivia se registraron inundaciones, sin embargo en esta oportunidad invitó a dar rienda suelta a la alegría en los festejos con bailes acompañados con arpegios tradicionales del folclore nacional.

En el vestíbulo de Palacio de Gobierno, un grupo de sacerdotes aymaras preparó un altar con una ofrenda que fue entregada a la Madre Tierra en presencia de Morales, del vicepresidente García Linera, de ministros, asambleístas y dirigentes de los movimientos sociales.

Ese ritual es parte de la tradicional "ch'alla", en la que se ofrecen tributos a la Madre Tierra en agradecimiento por los bienes recibidos durante el año y como plegaria para conseguir nuevos privilegios en los meses venideros.

Las "ch'allas" en Bolivia, sobre todo en las regiones andinas, se realizan el martes de carnaval, pero las oficinas estatales y privadas suelen adelantarlas para el viernes.

En el acto, los "amautas" (sabios) ataviados con su indumentaria originaria cubrieron con serpentina en el cuello a Morales, quien luego procedió a bailar con las mujeres indígenas que habían ingresado al histórico Palacio Quemado, ubicado en el corazón de La Paz.

Tras este ingreso, varios funcionarios bolivianos se apostaron en el palco oficial para observar el ingreso de las diferentes comparsas de las entidades públicas.

El gobierno de Morales decretó este viernes horario continuo, es decir suspensión de actividades desde el mediodía en las oficinas estatales y privadas; además, ratificó los feriados del lunes 16 y martes 17 por el carnaval.

Durante los cuatro días del carnaval en Bolivia destaca el desfile que se llevará cabo mañana sábado con la participación de unos 40.000 bailarines y músicos en Oruro, la capital del folklore, 230 kilómetros al sur de La Paz.

La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) declaró el carnaval de Oruro como patrimonio oral e intangible de la humanidad.

Los historiadores lo definen como el "antruejo mayor de los Andes" por la exhibición de distintos bailes andinos con los integrantes de las comparsas disfrazados como la "diablada", "morenada", "tinkus", "tobas", "cullaguada", "llamerada" y los caporales.

Otras farándulas masivas se efectuarán en Santa Cruz (este), La Paz (oeste) y otras ciudades bolivianas hasta el domingo de tentaciones, cuando se cierran las fiestas en Cochabamba (centro) con la entrada del Corso de Corsos, mientras que en La Paz, sede de gobierno, se realizará el tradicional "Entierro del Pepino".