RIO DE JANEIRO, 27 ene (Xinhua) -- La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, pidió hoy a los miembros de su gobierno trabajar "más con menos" para equilibrar las debilitadas cuentas públicas, sin poner en peligro la continuidad de las políticas sociales.
"Las conquistas sociales dependen mucho de la estabilidad y de la credibilidad de la economía", afirmó Rousseff en un discurso televisado tras su primera reunión con 39 ministros correspondiente a su segundo mandato.
El gobierno anunció varias medidas que incluyen aumento de impuestos y cortes fiscales para sanear la economía del país, algo que Rousseff justificó como un ajuste necesario, el cual aseguró no significa cambios al programa que presentó en su pasada campaña presidencial, cuando prometió aumentar el gasto social y las inversiones.
"Los ajustes que estamos haciendo son necesarios para mantener el rumbo y para ampliar las oportunidades, preservando las prioridades sociales y económicas del gobierno que iniciamos hace 12 años", dijo en relación a la llegada al poder del Partido de los Trabajadores (PT), con el ex presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva.
"Prometeremos el reequilibrio fiscal de forma gradual. Nuestra primera acción fue establecer una meta de resultado primario en 1,2 por ciento del PIB (producto interno bruto), un grande esfuerzo fiscal, pero un esfuerzo que la economía puede suportar sin comprometer la recuperación del crecimiento y del empleo", agregó.
Durante su discurso, dominado por temas económicos, Rousseff afirmó que para recuperar el crecimiento de la economía se necesitan crear condiciones para disminuir la inflación y la tasa básica de interés a medio plazo, además de garantizar la continuidad en la generación de empleo y renta.
Rousseff anunció que las medidas que su gobierno tomará en los próximos meses para reactivar la economía incluyen un plan de estímulo a las exportaciones y un programa de reducción de la burocracia.