"El sonido de la fricción entre los tenis y el piso, la brisa susurrando en mis oídos cuando iba corriendo, tirando y golpeando... disfruté todo en la cancha cuando el baloncesto se convirtió en mi interés", dijo Yao.
Todos sentirán aversiones en sus vidas. Si se limitan a rechazarlas, sufrirán más por ello. Si escuchan a otros y comparten sus sentimientos, ustedes pueden convertirlas gradualmente en algo que les interese, recomendó Yao.
"Entonces las disfrutarán", agregó el astro del baloncesto. "En este proceso, forjarán un buen carácter y se beneficiarán mucho de ello".
"El tío Yao nos ofreció un gran discurso. Pondré más empeño en practicar piano y convertirlo en mi interés", comentó Zhang Tianyi, un estudiante de la escuela Soong Ching-ling.