SANTIAGO, 28 may (Xinhua) -- "Cada año nos vemos sorprendidos por la calidad de los alumnos chilenos que participan en el Concurso Mundial de Idioma 'Puente Chino', que se realiza cada año en esa nación".
Así lo destacó Lilian Espinosa, directora ejecutiva del Instituto Confucio de la Universidad Santo Tomás, en entrevista con Xinhua, tras el concurso que se organizó este viernes en Santiago.
Resultaron ganadores los jóvenes Eduardo Ovando y José Alvarez en las categorías universitaria y secundaria, respectivamente, para participar en el Concurso Mundial "Puente Chino 2016, Sueños que iluminan el futuro", en Beijing. Además, otros cuatro jóvenes viajarán como oyentes.
"Cuando organizamos el primer 'Puente Chino', la mayoría de los participantes leían sus discursos ante el tribunal. Sin embargo, ahora es impensable que algún concursante tenga que leer su discurso y e igual ocurre con las presentaciones artísticas, que han sido superiores", indicó.
También dijo que "antes recitaban un poema y algún canto. Sin embargo, los alumnos se han atrevido a realizar cosas nuevas e innovadoras, como el Teatro a la Sombra, que, por vez primera, se vio este año en una presentación de Puente Chino, así como artes marciales y cantos que ahora protagonizan los jóvenes chinos".
Recordó que "estábamos acostrumbrados al uso del papel picado y a la caligrafía. Sin embargo, este año hubo varios participantes que expusieron cantos que ahora también se escuchan en China".
Este año, 13 alumnos de la categoría "universitarios" de seis universidades hicieron sus presentaciones, mientras que, en la categoría "secundarios", concursaron 22 alumnos, de 17 colegios y 13 ciudades distintas, lo cual da una idea de la extensión que ha ido abarcando el idioma chino mandarín en el país.
Espinoza resaltó que "China nos ofrece más beneficios y alternativas para poder acercar a nuestros estudiantes chilenos a la cultura milenaria de ese país".
Aseguró que, cada año, "hemos ido avanzando con los gobiernos central y locales de Chile, junto con el Ministerio de Educación y la Embajada de China, así como con distintas entidades de ese país que nos están apoyando, como la Empresa Hawei, que cuenta con oficinas en Santiago".
Resaltó que "esto nos motiva a inculcar más en Chile el idioma chino-mandarín. Lo que para nuestros padres fue relevante en su época de jóvenes el idioma inglés, hoy el chino- mandarín es lo mismo para nuestros hijos y, por eso, estamos apuntando a este semillero".
Afirmó que, a nivel nacional, los alumnos están en los colegios y, a través de la plataforma de la Universidad Santo Tomás se han establecido 10 nueves sedes del Instituto Confucio y "la idea es poder seguir ofreciendo la posibilidad de estudios a los alumnos de todo el país".
La directora dijo que la idea es que puedan seguir estudiando el chino mandarín cuando salgan de sus colegios y universidades "y puedan acceder al sin número de beneficios que tienen al pertenecer a un Instituto Confucio, no sólo con el concurso Puente Chino, sino con becas y campamentos de verano".
Dijo que este 2016, por cuarto año consecutivo, se organizó el Campamento de Verano con 20 estudiantes, y el requisito es ser alumno de la Universidad Sant Tomás en cualquier ciudad donde tenga sede, pero también de otras universidades del país.
El Instituto Confucio de la Universidad Santo Tomás cuenta en la actualidad con unos 800 alumnos.
Espinosa anunció que, próximamente, será la apertura del Salón Confucio en un colegio de la sureña Ciudad de Valdivia.
En 2015, el Instituto Confucio terminó con 2,000 estudiantes en todo el país que reciben "clases presenciales" de profesores de chino-mandarín y este 2016, firmó convenios con la Fundación "Cruzando el Pacífico" de China, que, en 2015, entregó 15 mil becas on line para su curso introductorio.
Esos alumnos pueden acceder a descuentos por parte de la Universidad para continuar el estudio de chino-mandarín y puedan realizar estudios superiores en esa lengua y llegar a tener el certificado oficial de ese idioma.
También el Instituto Confucio de la Universidad Santo Tomás está firmando convenios con municipios chilenos, instituciones privadas y el gobierno de Chile.
Chile cuenta con otro Instituto Confucio en la Universidad Católica de Santiago.
