BEIJING, 5 mar (Xinhua) -- Los observadores internacionales y la prensa estuvieron atentos hoy a las dos importantes reuniones que se llevaron a cabo en China, en busca de pistas sobre cómo es que la capacidad de recuperación de la enorme economía china está en una difícil pero necesaria transición y cómo otras economías pueden depender de su mayor crecimiento.
El portal japonés niconico donde se comparten videos difundió una transmisión en vivo de la apertura de la sesión plenaria anual de la Asamblea Popular Nacional de China y el discurso del primer ministro Li Keqiang para presentar un informe sobre el trabajo de su gobierno, que recibió más de 10.000 comentarios de la audiencia.
La sesión plenaria anual de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino (CCPPCh) también se lleva a cabo en Beijing. Las dos reuniones, conocidas como "Dos Sesiones" son estrechamente seguidas por los observadores quienes quieren obtener más información sobre los planes y políticas de desarrollo de China.
Por su parte, Banri Kaieda, ex jefe del Partido Democrático de Japón, comentó que China busca convertirse en una nación relativamente acomodada para el año 2020 al poner en marcha su XIII Plan Quinquenal de Desarrollo.
El primer ministro Li revisó el progreso hecho a lo largo del año pasado y explicó el plan para los próximos cinco años, particularmente los esfuerzos que se harán este año para garantizar un sólido crecimiento económico a la vez que se impulsan las reformas.
Indicó que China espera un crecimiento de entre 6,5 por ciento y siete por ciento este año, proponiendo un incremento en su déficit presupuestal a tres por ciento del producto interno bruto (PIB) para garantizar que el crecimiento económico se mantenga en avance.
Algunos medios informativos internacionales publicaron encabezados diciendo que China ha reducido su objetivo de crecimiento a entre 6.5 por ciento y siete por ciento, no obstante, reconocen que sigue siendo el crecimiento más acelerado del mundo.
China disfrutó de un crecimiento promedio de alrededor de 10 por ciento anualmente en las últimas tres décadas desde que inició su proceso de apertura a finales de la década de 1970.
Bambang Suryono, presidente de la Fundación Nanyang de ASEAN en Indonesia, declaró que es natural que China se desacelere dado que el crecimiento económico ha logrado una base mucho más amplia. El crecimiento de China a la velocidad actual significa una mayor producción añadida que lo que representó su crecimiento de 10 por ciento hace varios años.
China está avanzando ahora por una transición de una forma de crecimiento impulsando ampliamente por las exportaciones y la inversión hacia un modo de crecimiento impulsado más por el consumo interno. El gobierno ha fomentado la innovación y el espíritu emprendedor con el fin de lograr un crecimiento más sostenible.
Su sector de servicios ha crecido rápidamente, y actualmente representa ligeramente más de 50 por ciento del PIB, lo cual significa que aún hay potencial si se le compara con el alrededor de 80 por ciento en las economías desarrolladas.
"El informe del trabajo de gobierno mencionó la búsqueda de un crecimiento de alta calidad y subrayó la importancia de la creciente demanda interna. Esos esfuerzos, si tienen éxito, deben ayudar a China a lograr su objetivo de transformar la economía y mejorar la vida de la gente", dijo el Dr. Oh Ei Sun, ex asesor político del primer ministro de Malasia, Najib Razak.
La prensa internacional citó a Li diciendo que la economía china se mantiene con resistencia a la vez que reconoció que hay difíciles retos por delante. Señaló que la inflación ha permanecido baja mientras la creación de empleos ha mejorado más de lo esperado con alrededor de 13,12 millones de nuevos empleos el año pasado, a pesar del crecimiento económico ligeramente menor, de 6,9 por ciento.
"El gobierno chino aún tiene amplio espacio en la política macroeconómica para manejar una desaceleración en su economía. Por eso no debe ser una gran preocupación para la comunidad internacional", dijo Suryono.
El propuesto déficit fiscal equivalente a tres por ciento del PIB, aunque es más alto que el objetivo del año anterior de 2,3 por ciento, aún no es tan alto como algunos economistas piensan que puede ser.
China ha tratado de evitar políticas fiscales excesivamente expansionarias con el fin de impulsar la necesaria reestructuración económica.
El primer ministro chino también mencionó los planes para reducir significativamente la excesiva capacidad en industrias como el acero y el carbón, aunque esto significará que muchos trabajadores serán despedidos en los próximos de dos a tres años. El gobierno ha apartado miles de millones de yuanes para apoyarlos en la etapa de dificultades y les ayudará mejorando sus habilidades a través de capacitación.
Además, el primer ministro chino explicó los planes para reducir emisiones, llevar a cabo reformas en el sector financiero, abrir más la economía a la competencia, continuar mejorando los trámites de gobierno, y crear por lo menos 50 millones de empleos en ciudades para el 2020.
El informe muestra que China está prestando mucha atención a su medio ambiente, dijo Kaieda en una discusión sobre las reuniones en China.
"Japón ha avanzado en tecnologías relacionadas con el medio ambiente. Japón y China pueden cooperar en la protección del medio ambiente", comentó.