SEUL, 31 oct (Xinhua) -- El primer ministro chino, Li Keqiang, el premier japonés, Shinzo Abe y la presidenta surcoreana, Park Geun-hye, tienen previsto reunirse aquí el domingo para celebrar la sexta cumbre trilateral, a fin de abordar asuntos de interés regional.
La reunión, reanudada tras una suspensión de tres años y medio, marca un paso loable hacia la promoción de la cooperación en el noreste de Asia, pero podría poner nervioso a Estados Unidos, aliado de Japón y Corea del Sur, que ha ejercido una fuerte influencia en esta región desde hace mucho tiempo.
La preocupación de Washington es comprensible, pero debe recordar que los lazos rotos entre los tres vecinos perjudican la paz y prosperidad regional, y también socavan los intereses estadounidenses.
China, Japón y Corea del Sur son economías importantes a nivel mundial, cuyos PIB ocuparon el segundo, tercer y decimocuarto lugar respectivamente en 2014. Construir relaciones económicas y comerciales más estrechas entre ellos es importante para fortalecer la vitalidad económica y mejorar la vida del pueblo.
No hace mucho, China y Corea del Sur firmaron un acuerdo histórico de libre comercio. Se espera que la actual visita del premier Li a Corea del Sur pueda acelerar la implementación del pacto. Un potencial Acuerdo de Libre Comercio trilateral entre China, Corea del Sur y Japón ha estado sujeto a negociaciones desde 2012, y sigue teniendo un lugar importante en la agenda de esta cumbre.
La integración económica es vital para la paz y estabilidad regional. Los lazos bilaterales entre China y Corea del Sur se encuentran en su mejor periodo de la historia. Las tensiones entre China y Japón, a causa de asuntos históricos y disputas territoriales, también han disminuido desde finales del año pasado. A pesar de los obstáculos internos y externos, los tres vecinos reconocen la necesidad de reforzar la confianza política mutua.
Construir un noreste de Asia más cercano es una opción natural y necesaria. China sigue siendo un gran país en vías de desarrollo y existen muchas posibilidades para expandir la cooperación de beneficio mutuo con Corea del Sur y Japón.
La iniciativa de la Franja y la Ruta de Beijing y el establecimiento del Banco Asiático para Inversión en Infraestructura (BAII) ofrece una plataforma práctica para la profundización de la cooperación económica con sus vecinos.
Corea del Sur ha establecido la economía como el principal objetivo de sus políticas en 2015, esforzándose para apoyar el crecimiento a través de la innovación. La administración de Abe también subraya la importancia de la economía y el bienestar social.
La cooperación sin contratiempos entre China, Corea del Sur y Japón es indispensable para la paz y prosperidad en Asia oriental, dado que los tres países ocupan cerca del 90 por ciento del total de la producción económica en la región. Como los mayores jugadores regionales, deben responsabilizarse de mantener la interacción positiva y establecer un buen ejemplo para la cooperación regional.
La reanudación de la cumbre trilateral proporciona una buena oportunidad para reafirmar la importancia de construir una base política sólida para la cooperación trilateral, que de hecho todavía se encuentra en una etapa primaria.
En 2008, los líderes de las tres partes tomaron un paso crucial y se reunieron por primera vez fuera del marco de la reunión de la ASEAN+3. Ningún desafío temporal debería perturbar este mecanismo de cooperación.
La próxima cumbre debe servir como punto de inflexión en la cooperación trilateral. Se espera que los tres países se esfuercen en deshacerse de los obstáculos para conseguir la reconciliación y cooperación regional con el fin de construir un noreste de Asia más estable.
