DESAFIANDO AL INFIERNO
La ciudad de Tianjin es hogar de unos 15 millones de personas. El camino que lleva al sitio del incendio sigue bloqueado y quienes lo combaten sólo pueden lanzar polvo seco y espuma desde cierta distancia.
Un equipo de más de 200 especialistas militares en manejo de materiales nucleares y bioquímicos fue enviado a la ciudad norteña desde Beijing para ofrecer su ayuda.
Las personas heridas llenan las salas de urgencias de los hospitales. En el hospital TEDA, que recibió a 150 víctimas, un bombero uniformado de unos veintitantos años era atendido en una camilla. Sin aliento y tosiendo y con la cara negra de humo, logró contar su calvario. "Estaba completamente oscuro, había humo por todas partes. Mis compañeros estaban mal heridos, pero yo estoy bien". El oficial está siendo atendido por inhalación de humo tóxico.
