HELSINKI, 16 mar (Xinhua) -- Un polémico incidente migratorio ha generado discusiones tanto en Finlandia como en China: Un abuelo chino que visitaba a su hija en Finlandia con una visa de turista fue contratado por su yerno finlandés para cuidar a los niños a cambio de dinero y terminó deportado por el Servicio Migratorio de Finlandia (Migri).
El pensionado de 62 años de edad fue despojado de su pasaporte y escoltado fuera del país y se le prohibió entrar al Area de Schengen durante dos años. Una foto publicada el 5 de marzo por el diario finlandés Helsingin Sanomat lo mostró cargando a su nieto en el aeropuerto mientras su hija lloraba.
El servicio migratorio finlandés citó como razón para la deportación el "intentar burlar las regulaciones con un empleo inventado" y "carecer de calificaciones y de experiencia previa en el cuidado infantil", informaron medios locales.
La ministra del Interior de Finlandia, Paivi Rasanen, expresó su preocupación y dijo que cree necesario examinar la regulación de inmigración.
"En este caso, incluso el tribunal administrativo estuvo de acuerdo con el servicio migratorio. Esto plantea la duda de si debemos revisar las regulaciones", dijo la ministra el 7 de marzo citada por Helsinki Times.
Rasanen también afirmó que es absurdo que el servicio migratorio finlandés le pida experiencia a un abuelo en el cuidado de niños.
"Bien por usted ministra. Usted es honesta", escribió un cibernauta chino bajo el nombre de Lan Se Fang Zhen. El comentario fue una de los 13.000 publicaciones luego de que Sina News volvió a publicar la historia de Xinhua. Comentarios similares se vieron en otros sitios de Internet y servicios móviles.
A pesar de las miles de publicaciones solidarias, bastantes lectores chinos expresaron su apoyo al servicio migratorio finlandés.
"¿Contratado por su yerno? Evidentemente están haciendo trampa", dijo un lector de noticias móviles Phoenix identificado como LTT. Algunos incluso resaltaron que Finlandia es "el país más honesto y autodisciplinado".
Un empresario chino, quien se identificó como Gao, experimentó una situación similar hace más de 10 años. Gao se casó con una finlandesa y crió a tres hijos en Finlandia.
"Queríamos contratar a mi padre para que cuidara a mis hijos, pero nuestra solicitud fue rechazada. Mi padre fue deportado y no se le permitió entrar a Finlandia en los siguientes dos años", recordó Gao.
Cada vez más chinos que viven en Finlandia recurren a tales métodos, pero la mayoría de ellos han fracasado porque la autoridad sabe que esto podría constituir una carga para la sociedad finlandesa acosada ahora por el envejecimiento de la población y el enorme sistema benefactor, indicó Gao.
Otra inmigrante china que dijo que llamarse Chen señaló que logró obtener un permiso de residencia de tres años para su madre sobre una base laboral.
"Quizás saben que estoy demasiado ocupada para cuidar a mi hijo o quizá piensan que desempeño un trabajo que sirve mucho a Finlandia", especuló Chen, quien es una intérprete trilingüe, como la razón para que se le concediera el permiso temporal.
Emplear a su madre no es fácil. Chen tiene que gastar 2.200 euros (cerca de 2.335 dólares) en el salario mensual de su madre, de los cuales cerca de 500 euros van al sistema de seguridad social y 360 euros llegan a la oficina de impuestos. Además, Chen tuvo que adquirir un departamento separado para su madre.
"Tengo suerte", dijo Chen, a pesar de las dificultades financieras. La intérprete dijo que es bueno tener una ayudante en la vida familiar y señaló que es extremadamente importante para un adulto chino disfrutar del contacto emocional con los padres.
"En la cultura china, la vida familiar no es feliz sin los padres", dijo Chen, quien señaló que muchas regulaciones chinas son realizadas a partir de este concepto de "gran familia".
"Yo no justificaría a quienes tienen una agenda secreta, pero sería mejor que los inmigrantes chinos tuvieran más oportunidades para reunirse con sus padres", indicó Chen.
Chen dijo que un permiso para un período prolongado de visita de uno a dos años sería favorable.