BEIJING, 27 ene (Xinhua) -- La alta tasa de abortos en China ha disparado la preocupación social por la salud y educación sexuales de las jóvenes, con los expertos pidiendo que las autoridades sanitarias y las familias cooperen para protegerlas, publica hoy martes el diario China Daily.

Según los datos del Centro de Investigación Tecnológica de la Comisión Nacional de Salud y Planificación Familiar (CNSPF), al año se realizan cerca de 13 millones de abortos en el país, de los que el 62 por ciento corresponde a mujeres con edades de entre 20 y 29 años, la gran mayoría de ellas solteras. Además, más del 20 por ciento tuvieron más de un aborto.

Qi Rongji, doctora jefe del departamento de obstetricia y ginecología de un hospital en la municipalidad septentrional de Tianjin, indicó que "el verdadero número de abortos debe ser más alto, porque el dato publicado por la CNSPF sólo recoge los realizados en los hospitales registrados, sin incluir los llevados a cabo en clínicas no registradas".

Qi destacó que el número de mujeres menores de 16 años que abortan está creciendo a un ritmo del 30 por ciento anual en los centros médicos.

Según la CNSPF, el gobierno inyectó 2.470 millones de yuanes (402,5 millones de dólares) en la distribución de anticonceptivos durante el XI Plan Quinquenal de China (2006-2010), incluyendo píldoras anticonceptivas, preservativos y dispositivos intrauterinos. El país cuenta para su distribución con 37 centros de servicios a nivel provincial con el apoyo de 700.000 trabajadores a tiempo parcial o completo.

Guo Min, especialista de la oficina en China de Marie Stopes International, una organización no gubernamental (ONG) especializada en la salud sexual y reproductiva, aseguró que "muchas jóvenes que abortan en nuestras clínicas aseguraron desconocer cómo es un condón".

Esta ONG ha estado trabajando para promover el cuidado médico entre los jóvenes desde 1999. Construyó su primera clínica de planificación familiar en Qingdao, ciudad de la provincia oriental de Shandong, en el 2000. Hasta el momento, ha abierto tres centros similares en China, proporcionando cirugía y educación sexual a las jóvenes.

Guo indicó que "la mayoría de estas mujeres no suele tener una buena educación, e incluyen trabajadoras migrantes, profesionales urbanas y estudiantes. Sus edades varían de 13 a 24 años y nunca han recibido una adecuada educación sexual, e incluso no oyeron hablar de anticonceptivos de administración oral o de preservativos femeninos".

La experta subrayó un fenómeno cada día más preocupante: "Dado que estas mujeres no suelen estar casadas y tienen miedo a embarazos inesperados, suelen recurrir a pequeños hospitales y clínicas privadas, en lugar de ir a los hospitales públicos para tener acceso a un servicio seguro y de calidad".

En China, los anuncios sobre "abortos sin dolor" son comunes y lanzan el mensaje de que el aborto es una cosa fácil y con pocas consecuencias.

Shan Dan, doctora del Hospital de Obstetricia y Ginegología de Beijing, apuntó que "estos anuncios engañan fácilmente a las mujeres sobre los riesgos y peligros que suponen los abortos inseguros".

Shan señaló que los abortos aumentan los riesgos de embarazos ectópicos e infecciones bacterianas, además de provocar la esterilidad de entre el 2 y 5 por ciento de las mujeres que optan por ellos.