La meta a mediano plazo de la estrategia es, para 2020, controlar la población permanente de Beijing por debajo de 23 millones y aliviar la "enfermedad urbana" de Beijing como la contaminación del aire y la congestión de tránsito.
En el largo plazo, el objetivo es una región integral con mejor estructura económica, un ambiente más limpio y servicios públicos mejorados. La región integrada será competitiva y con una influencia mundial, de acuerdo con el documento emitido el mes pasado por el grupo líder
Se dará prioridad a la administración del tránsito, la protección ambiental, la seguridad de energía y las actualizaciones industriales. Los servicios públicos serán mejorados y el área será convertida en un mejor lugar para los negocios extranjeros.
La innovación será fomentada y las fuerzas del mercado jugarán un papel mayor en el uso de los recursos en la región.
China ha esperado por mucho tiempo impulsar el crecimiento en la densamente poblada región de Beijing-Tianjin-Hebei. A inicios de julio, Beijing anunció que mudaría parte de su administración fuera del centro de la ciudad hacia los suburbios orientales de Tongzhou como parte de la contribución de capital al desarrollo coordinado de la región Beijing-Tianjin-Hebei.
"Respecto a Tianjin, un área coincidente abarcada por las estrategias del país que incluyen al desarrollo coordinado de Beijing-Tianjin-Hebei y a la Iniciativa de la Franja y la Ruta, es importante que avancemos en la apertura, captación inversiones, ampliación del comercio exterior y en la mejoría de los servicios financieros, entre otros, en lugar de la propaganda", dijo Han Jing, subdirector de la oficina de economía regional de la Comisión de Desarrollo y Reforma de Tianjin.
