En el centro de un piscina redonda, la obra de Tan incluye audio, actuaciones musicales en video e interacción con el público y se centra en su percepción de una parte de la herencia folclórica de China, el nu shu, un antiguo idioma creado por mujeres para mujeres en Hunan y transmitido en secreto de generación en generación.

"Yo nací en Venecia y para mí, la Bienal de cada dos años forma parte de mi vida. Es fantástico que las obras de arte de artistas que viven tan lejos de Italia lleguen a Venecia y puedan ser descubiertas por todos aquí", dijo el visitante local Piero Casellati.

"Creo que mientras más sepamos, más abiertos estaremos al mundo", dijo Casellati a Xinhua. "Nunca he estado en China, pero estas obras de arte definitivamente incrementan mi voluntad de visitar este gran país", dijo.