Una competición de salto de perros cuyo propósito es probar las habilidades de los perros fue celebrada en Budapest, Hungría, el pasado sábado. Los dueños arrojaron un juguete en la piscina, a la que los perros se lanzaron para recogerlo. Unos perros disfrutaron la competición y fueron capaces de saltar por lo menos cuatro metros para pasar a la final. Otros tuvieron miedo de entrar en la piscina.