PARIS, 20 may (Xinhua) -- Francia indicó hoy que se tiene que distribuir a los refugiados de forma más justa entre los 28 países miembros de la Unión Europea y se negó a aceptar las cuotas de solicitantes de asilo propuestas por la Comisión Europea.

"Francia apoya plenamente la idea de que estas personas sean distribuidas, de forma provisional y conforme a parámetros que deben discutirse a fondo, de manera más equitativa entre los Estados más expuestos y los distintos países de la Unión Europea", indicaron el ministro de Relaciones Exteriores de Francia, Laurent Fabius, y el ministro del Interior, Bernard Cazeneuve, en un informe conjunto presentado en una reunión del gabinete.

Los dos funcionarios dijeron que es inaceptable que el 75 por ciento de los solicitantes de asilo sean albergados en sólo cinco países: Francia, Italia, Alemania, Suecia y Reino Unido.

A finales de abril, Jean-Claude Juncker, jefe de la Comisión Europea, pidió a los miembros del bloque fijar cuotas de inmigración para ayudar a Italia y Grecia a hacer frente al creciente número de migrantes indocumentados y solicitantes de asilo que huyen de los conflictos en sus países de origen para buscar una mejor vida en los países europeos.

El miércoles pasado, la comisión indicó que se distribuirán 20.000 refugiados entre los países miembros del bloque europeo en los próximos dos años.

Fabius y Cazeneuve enfatizaron que "Francia se opone y seguirá oponiéndose a la idea de cuotas para las solicitudes de asilo. Buscar el estatus de refugiado es un derecho otorgado conforme a criterios y objetivos que no pueden ser sujetos a una cuota".

Los ministros franceses también se negaron a aceptar una cuota de inmigrantes indocumentados y propusieron enviarlos a sus países de origen tan pronto como lleguen a algún país europeo.

Debido a que miles de migrantes indocumentados y solicitantes de asilo, principalmente originarios de países árabes conflictivos, intentan alcanzar la otra orilla del Mediterráneo, Francia pidió reforzar los controles fronterizos, combatir a los traficantes de migrantes y las redes de inmigración documentada, aumentar la cooperación e incrementar la ayuda a los países de origen de los migrantes indocumentados.

El primer ministro Manuel Valls dijo el sábado que Francia ya ha hecho mucho, dado que ya ha abierto sus puertas a 5.000 refugiados de Siria y a 4.500 refugiados de Irak desde 2012.