NACIONES UNIDAS, 4 may (Xinhua) -- El conflicto en Yemen, la inseguridad y la escasez de combustible siguen obstaculizando la entrega de la asistencia a las familias desplazadas y otras comunidades vulnerables y afectadas por el conflicto en ese país, indicó hoy un vocero de la ONU.

La Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCAH) señaló que los socios humanitarios han informado de dificultades en el suministro de servicios médicos como resultado de la actual situación de seguridad y los constantes ataques aéreos contra Haradh, Saada y Saná, señaló el vocero de la ONU, Stephane Dujarric, durante la conferencia de prensa diaria.

"Los socios de ayuda alimentaria informaron que tuvieron que suspender la ayuda en el distrito de Haradh y en Al Hudaydah por la falta de combustible", añadió el vocero.

El número de víctimas y desplazados sigue aumentando, indicó el vocero, quien añadió que en Adén, donde continúa la violencia, las autoridades locales reportaron que el 98 por ciento de los 62.869 residentes del distrito de Khormaksar se han marchado y que las familias restantes están atrapadas y aguardan condiciones seguras para salir.

"En Adén, fuentes locales informan de una violencia constante y generalizada", añadió el vocero. "Una tregua de dos horas propuesta por el Movimiento de Resistencia del Sur no ha sido observada".

El coordinador humanitario de la ONU para Yemen, Johannes van der Klaauw, está pidiendo en términos enérgicos a la coalición que detenga los ataques contra el aeropuerto de Saná y mantenga este importante salvavidas para que así los socios humanitarios puedan llegar a todos los afectados por el conflicto armado en Yemen.

Más de 1.200 personas han muerto y 300.000 han huido de sus hogares en los cerca de dos meses de enfrentamientos en este país del Golfo devastado por la guerra.

Los equipos médicos y de asistencia de emergencia del extranjero enfrentan dificultades en la realización de traslados aéreos para aumentar la operación humanitaria con el fin de abordar las necesidades de los cada vez más vulnerables yemeníes.