NACIONES UNIDAS, 29 abr (Xinhua) -- El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, condenó hoy en términos enérgicos el ataque de artillería y el bombardeo aéreo llevados a cabo el martes contra el campamento de refugiados de Yarmouk en Damasco, a pesar de las garantías del gobierno sirio de que el campamento no sería atacado mientras hubiera civiles dentro.
Ban pidió al gobierno sirio poner fin de inmediato a cualquier operación militar que pudiera poner en peligro la vida de los civiles en el campamento de Yarmouk y apegarse estrictamente a sus obligaciones conforme al derecho internacional humanitario y a las leyes de derechos humanos para proteger a los civiles durante conflictos armados, se indicó en un boletín de la ONU.
El secretario general también pidió a todas las partes detener la violencia para así permitir un acceso humanitario seguro y sostenido a los civiles dentro del campamento.
Miles de civiles en el campamento son asediados adentro por los terroristas y otros grupos armados y afuera por las fuerzas del gobierno, añadió la declaración.
"El secretario general exhortó al Consejo de Seguridad y a los Estados miembros con influencia sobre las partes en el terreno, incluyendo al gobierno sirio, a hacer todo lo que esté en su poder para proteger las vidas civiles", se indicó en la declaración.
Establecido como un campamento de refugiados para palestinos en la década de los cincuenta, Yarmouk poco a poco se transformó en un barrio en el transcurso de los años, pero ha estado envuelto en el conflicto sirio desde 2012.
A inicios de este mes, militantes del Estado Islámico lanzaron ataques contra Yarmouk con el objetivo de arrebatar el campamento a los rebeldes con los que rivalizan. La ofensiva empeoró las ya horribles condiciones de sus residentes.