WASHINGTON, 27 ene (Xinhua) -- El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y la canciller alemana, Angela Merkel, mantuvieron este martes una conversación telefónica en la que discutieron el significativo aumento de la violencia en el este de Ucrania, informó la Casa Blanca.
Según un comunicado de la Casa Blanca, los dos líderes expresaron su preocupación por el apoyo material de Rusia a los separatistas y su fracaso en el cumplimiento de los compromisos asumidos en el acuerdo de Minsk, y además coincidieron en la necesidad de que Rusia se responsabilice de sus acciones.
"También coincidieron sobre la importancia de finalizar un robusto paquete de ayuda financiera para Ucrania, que le permita estabilizar su economía mientras continúa implementando reformas que sentarán las bases para una vuelta al crecimiento y la prosperidad", reza el texto.
Marcada por el bombardeo del pasado sábado en la ciudad portuaria de Mariupol, en el que se perdieron al menos 30 vidas, la situación en Ucrania ha empeorado en medio de una nueva escalada de la violencia.
El ministro de Relaciones Exteriores ruso, Sergei Lavrov, afirmó el lunes que Moscú está haciendo esfuerzos para restablecer el proceso de paz en Ucrania.
"Estamos convencidos de que el proceso de paz necesita restablecerse y se están haciendo los esfuerzos necesarios para ello, en primer lugar para abrir un diálogo total, sostenible y directo entre el gobierno de Kiev y los insurgentes", explicó Lavrov ante los periodistas después de reunirse con su homólogo israelí, Avigdor Liberman.
El canciller ruso culpó a Occidente por la "costumbre crónica" de acusar a Rusia y a los insurgentes ucranianos de todo lo que ocurre en las zonas conflictivas, y citó como último ejemplo el bombardeo de la ciudad ucraniana de Mariupol, en el que el sábado murieron al menos 30 personas y casi 100 resultaron heridas.