Por René Quenallata Paredes
LA PAZ, 4 jul (Xinhua) -- El "pijchu" o masticado de la hoja de coca de 100 gramos, producida en la parte andina de Sudamérica, cuesta en varios países de Europa 20 euros (22,08 dólares) por varios factores que van desde su riqueza nutritiva, medicinal y su restricción legal.
El experto y activista belga, Joop Omen, quien llegó a Bolivia junto a una decena de activistas y expertos extranjeros que defienden el consumo de la milenaria hoja agrupados en la asociación "Amigos de la Coca", explicó que en países europeos, como Bélgica, la coca se consume en la asociación y es complicada su llegada.
Centenares de activistas e investigadores conformaron en sus países de origen de Europa una asociación de consumidores de hoja de coca, por lo que, cada mes se encargan de transportar pequeñas cantidades (150 gramos) con los respectivos gastos que realiza la asociación.
"En síntesis, los consumidores de coca europeos llegamos a pagar 20 euros para cada 'pijchu', eso representa comparativamente en países sudamericanos un gran costo, por tanto tiene un importante valor monetario", aseveró.
Admitió que muchos comercializadores transportan coca de manera clandestina a las comunidades donde existen residentes bolivianos y que los mismos comercializan en tiendas latinas ilegales a un monto de 1.200 bolivianos (172 dólares) el kilogramo de coca.
"La coca está valorizada, cotizada y tiene mercados, las autoridades europeas en algunos casos han confiscado la hoja, pero al no haber problema han entregado a sus destinatarios porque los recintos aduaneros vieron que era para consumo personal y que no tenía la intención de ser comercializada y menos convertirla en droga", señaló Omen.
Lamentó que el aparato gubernamental boliviano haya decidido impedir enviar coca por correo. Aunque tiene información que ahora pretende ser reanudado a partir de estas nuevas iniciativas emprendedoras.
"Queremos hacer llegar coca a nuestros socios en pequeñas cantidades y eso lo vamos a conseguir con las colaboración de las autoridades bolivianas a través de los autodenominados chasquicocas (...) si tenemos problemas con las autoridades europeas asumimos toda la responsabilidad", expresó.
El representante belga sostiene que, ante un posible juicio, ellos están respaldados en convenios internacionales, documentación científica producida en los andes y otras regiones del planeta sobre el aporte de la coca a la salud.
DESPENALIZACION
Activistas de diferentes nacionalidades promueven estrategias globales para enseñar al mundo, principalmente Europa, sobre las cualidades medicinales y nutritivas de la coca, con el objetivo de conseguir una apertura de mercados para este arbusto, previa despenalización internacional.
Enla actualidad Bolivia consiguió la despenalización del mascado de coca sólo en el país andino amazónico, pero sigue siendo prohibido en el mundo.
Expertos y activistas de diferentes nacionalidades llegaron a los Yungas de La Paz (oeste) y el Chapare de Cochabamba (centro), donde estuvieron por más de dos semanas en esas regiones para conocer las experiencias de los productores y coadyuvar los objetivos a nivel internacional para apoyar con campañas a la despenalización mundial de la hoja sagrada.
Luego de lograr la despenalización del acullico en las Naciones Unidas, el gobierno de Evo Morales busca encaminarse en la despenalización de la coca, según el canciller boliviano David Choquehuanca.
Pese a que el consumo tradicional de la coca es legal en Bolivia, la exportación de esta hoja o de productos derivados de este vegetal están prohibidos, ya que para ello, se indicó, se debe demostrar que los artículos deben estar libres de alcaloides. Esa es la posición sustentada por países que son considerados potenciales destinatarios.
En tanto, la activista mexicana Brenda Pérez manifestó que es fundamental dar señales claras al mundo de la voluntad de luchar contra el narcotráfico y demostrar que la coca en su estado natural no es cocaína.
"Nosotros trabajamos para desestigmatizar que la coca es droga, por eso encaramos campañas para explicar sobre sus cualidades naturales a los europeos", añadió.
A su vez la austriaca Gabriele Kozer, investigadora en Biología, manifestó que en su país conocen a la coca como "droga blanca" o la asociación a la Coca Cola, pero no saben de sus ricas propiedades.
"Por eso es importante difundir al mundo, con varias estrategias, la verdadera realidad de la coca y eso contribuirá a que el mundo exija la hoja como medicina u otros derivados", agregó.
El ex viceministro boliviano de la Coca, Dionisio Núñez, explicó que Bolivia, junto a Perú y otros países productores, debe unirse a todos los grupos, gobiernos y organizaciones que defienden la coca para hacer fuerza en el objetivo de conseguir su despenalización.
"Nuestro objetivo está fijado al igual que el gobierno en la despenalización internacional de la coca y simultáneamente se debe ser trabajar en la exportación del producto como coca o industrializado", aseveró.
Según Núñez, los activistas extranjeros llegaron a Bolivia con el objetivo fortalecer sus conocimientos y difundir en el mundo las bondades medicinales y nutricionales de la hoja de coca para que ésta sea exportada en mercados justos y equitativos a nivel regional y mundial.