BEIJING, 16 may (Xinhua) -- La esencia y el contenido de la cooperación integral entre China y América Latina son similares a los de la iniciativa de "la Franja y la Ruta", de acuerdo con un informe académico dado a conocer ayer viernes en Beijing.

A pesar de que la región de América Latina y el Caribe no está incluida en la iniciativa de "la Franja y la Ruta", existen semejanzas entre ésta y la planificación de cooperación integral sino-latinoamericana, indica el Informe de Desarrollo de América Latina y el Caribe, publicado por el Instituto de América Latina (ILAS, siglas en inglés) de la Academia de Ciencias Sociales de China.

La iniciativa de la Franja y la Ruta se refiere a la Franja Económica de la Ruta de la Seda y la Ruta Marítima de la Seda del Siglo XXI.

El informe apunta que frente a la débil demanda de la economía global y la excesiva liquidez, el gobierno chino está transfiriendo su atención a los países en vía de desarrollo y los mercados emergentes, que cuentan con un enorme potencial.

Mediante el mecanismo de cooperación multilateral con un desarrollo inclusivo, China acelerará la transformación de la estructura y el modelo de su desarrollo económico e impulsará el crecimiento futuro del mundo, dice el informe.

Según los datos de la Comisión Económica de América Latina y el Caribe de la ONU de 2013, cada vez que la economía china crece un 1 por ciento se impulsa en un 0,5 por ciento el crecimiento económico de América Latina.

Desde principios del siglo XXI, el interés compartido por un mayor crecimiento ha estrechado las relaciones entre China y América Latina. Según los datos aduaneros, el volumen de comercio bilateral entre China y América Latina alcanzó los 263.600 millones de dólares en 2014, con un aumento del 0,8 por ciento.

La academia pronostica que en un plazo corto y medio el comercio y la inversión seguirán siendo los dos pilares principales de la cooperación económica sino-latinoamericana, mientras que la construcción infraestructural se convertirá en el foco de interés.

Al mismo tiempo, el documento sugiere que se extiendan los diversos tipos de diplomacia pública, tales como los intercambios educativos y entre grupos de expertos, así como la comunicación a nivel de gobiernos locales entre ambas partes.

Además, se deben coordinar los lazos entre China y las organizaciones nacionales, regionales y subregionales en América Latina para apoyar el desarrollo de la cooperación integral entre el país asiático y la región, agrega el documento.

Ese mismo día, el ILAS y el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) también celebraron una conferencia en la que los expertos tanto chinos como latinoamericanos discutieron sobre los temas de seguridad ciudadana y gobernanza.

Los participantes aseguraron que China y América Latina están experimentando una transformación estructural, y deben reforzar la cooperación en seguridad ciudadana y gobernanza.

La conferencia revisó la situación económica, política y social de los países latinoamericanos y China, así como los temas relevantes en materia de desarrollo, como la seguridad ciudadana y la gobernanza, que constituyen desafíos para ambas partes, señaló Enrique García, presidente ejecutivo de CAF.

Según Li Peilin, subdirector de la Academia de Ciencias Sociales de China, para los países en vías de desarrollo es importante lograr el equilibrio entre el desarrollo económico y social, impulsar la reforma y renovación y perfeccionar la gobernanza.

Los países latinoamericanos han llevado a cabo una exploración y renovación en materia de gobernanza y solución de conflictos sociales, y China debe estudiar y aprender algunas de sus experiencias exitosas, dijo Li.

Fan Weicheng, director del Instituto de Investigación de Seguridad Pública de la Universidad Tsinghua, afirmó que la universidad ha desarrollado productos relacionados con la seguridad pública y los ha vendido a Ecuador, Venezuela y Bolivia, añadiendo que la universidad espera más cooperación con los países latinoamericanos en este sentido en un futuro.