QUITO, 5 feb (Xinhua) -- El canciller de Ecuador, Ricardo Patiño, informó hoy que se coordina una reunión en Quito de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) para atender el pedido de Venezuela para frenar supuestas acciones injerencistas de Estados Unidos en ese país.

"Estamos organizando una reunión. Justamente hoy en la mañana estaba conversando el canciller de Venezuela, con la canciller de Colombia, y con el secretario general de la Unasur, Ernesto Samper, para coordinar pronto una reunión de cancilleres", dijo Patiño al canal estatal Gama TV.

El objetivo de la cita, que sería en la capital ecuatoriana, será "atender el pedido de presidente (Nicolás) Maduro", precisó.

El pasado 3 de febrero, el mandatario venezolano pidió a la Unasur y a la CELAC intervenir para frenar supuestas acciones injerencistas de Estados Unidos para desestabilizar a su gobierno.

"Le he solicitado a la Unasur y a la CELAC que tomen iniciativas en carácter diplomático para evitar que se le haga más daño a Venezuela, y que desde Estados Unidos se pretenda sancionar a una patria entera y que se tomen medidas fuera del derecho internacional", dijo Maduro.

El canciller ecuatoriano agregó que Ecuador, que ejerce actualmente la Presidencia Pro Témpore de la Celac, y que acompañó el proceso de diálogo entre el gobierno y la oposición venezolana tras las protestas antigubernamentales de febrero de 2013, seguirá apoyando a ese país.

"El Ecuador va a continuar con esa decisión política de fortalecer la institucionalidad en Venezuela, para que se fortalezcan, se sigan atendiendo los derechos humanos y para evitar una desestabilización como la que se pretende desde algunos otros lugares", apuntó.

El canciller sostuvo que la desestabilización en Venezuela es promovida "desde algunos grupos de poder no podemos decir desde Estados Unidos, pero sí de algunos grupos fácticos que están interesados en tomarse el petróleo de Venezuela, las riquezas que Venezuela tiene para su provecho, para el control internacional de la energía".

En ese sentido, dijo que "es fundamental proteger a Venezuela no solo del manejo soberano, que ellos deben tener de su petróleo, sino también para evitar una situación que puede afectar la paz de nuestra región".

"Estamos cuidando esto, es una de nuestras fortalezas más importantes, tenemos un proceso de desarrollo positivo en los últimos tiempos, que hay que cuidar la paz de intervencionismos extranjeros", destacó.

Asimismo, consideró que las acciones de desestabilización en Venezuela iniciaron con las violentas protestas del año pasado.

"Por supuesto, evidentemente hay un proceso de desestabilización en Venezuela, que viene desde hace un tiempo atrás, no olvidemos lo que pasó el año pasado; se activaron acciones violentas que provocaron decenas de muertes", señaló.

Agregó que las acciones se derivaron de lo que consideró una "violencia política", que afortunadamente disminuyó con la llegada a Venezuela de un grupo de cancilleres de la Unasur, incluído él, para acompañar un proceso de diálogo con la oposición.

"Con la llegada del conjunto de cancilleres de América del Sur se desactivó una situación que iba generando una acumulación de muertes en ese país que había que terminar", explicó.

Al mismo tiempo, rechazó las nuevas sanciones impuestas por Estados Unidos a funcionarios del gobierno venezolano, que Washington considera "incursos o cómplices de violaciones a los derechos humanos" o "implicados en actos de corrupción".

Es una "decisión absolutamente ilegal de Estados Unidos", dijo Patiño, tras anotar que la región lo va a seguir rechazando.

"Ojalá vaya mejorando la relación (de Estados Unidos) con Cuba, y ojalá terminando el bloqueo, que todavía no termina, para comenzar con bloqueos con otros países", afirmó.

Advirtió que "de ninguna manera vamos a aceptar eso, ya es bastante lo que se ha intervenido, lo que algunos países del Norte han intervenido en la región africana, en la región del Medio Oriente, para que ahora también pretendan intervenir ilegítimamente, violentamente, en contra la voluntad de nuestros pueblos en nuestra región", concluyó.