BEIJING, 21 ene (Xinhua) -- Por primera vez en su historia, China se ha convertido en un exportador neto de capital, con su inversión directa en el exterior superando el flujo de entrada de inversión extranjera directa en 2014.
Los inversores chinos canalizaron capital a 6.128 compañías en 156 países en 2014, con una inversión total de 102.890 millones de dólares, un aumento del 14,1 por ciento interanual, informó el Ministerio de Comercio chino en una conferencia de prensa hoy miércoles.
El incremento fue mucho más rápido que el del 1,7 por ciento registrado en la inversión extranjera directa, que alcanzó los 119.600 millones de dólares, de acuerdo con la cartera. Se trata de la primera vez en que los flujos de capital nominal recíprocos se han situado casi en equilibrio y marca el auge de los nuevos motores de crecimiento en un momento de ralentización económica en China.
"Si se incluyera la inversión de empresas chinas a través de terceras partes, el volumen total de inversión china en el ultramar alcanzaría los 140.000 millones de dólares, lo que significa que China es ya un neto inversor en el ultramar", afirmó el portavoz del ministerio, Shen Danyang.
Los inversores chinos están invirtiendo en bienes raíces, negocios y otros activos extranjeros, mientras el crecimiento interno experimenta una desaceleración. El país registró en 2014 el ritmo más bajo de expansión económica de los últimos 24 años, según los datos del producto interno bruto hechos públicos el martes.
"El incremento de la inversión directa en el exterior se debe principalmente al aumento de la ambición y del hambre de las compañías chinas por nuevas oportunidades, el impulso procedente de la sed de inversión de numerosos países alrededor del mundo y las facilidades concedidas por las políticas de apoyo del gobierno", dijo Shen.
"Por tanto, no se trata del 'Plan Marshall' impulsado por el gobierno del que se ha especulado", añadió.
Las fusiones y adquisiciones se diversificaron en términos de proyectos y campos de inversión en 2014. Los sectores de la energía y la minería mantuvieron su estado de popularidad, y se realizaron adquisiciones en el de la manufactura. Además, se lograron avances en el sector agrario, según Shen.
Mientras tanto, se está conformando una mejor estructura de inversión industrial, en la que los tres sectores clave de inversión en el exterior son los servicios de arrendamiento y comerciales, la minería y los negocios de venta al por menor y mayor.
Las empresas chinas también hicieron un mejor trabajo a la hora de equilibrar los intereses de los accionistas y de honrar la responsabilidad social corporativa mediante el impulso del empleo local y la concesión de ayuda en problemas de contaminación.
El Consejo de Estado, el gabinete de China, emitió el pasado noviembre una lista mucho más corta de proyectos de inversión directa en el exterior que necesitan el visto bueno del gobierno, a fin de animar a las compañías a que entren en el mercado internacional.
La inversión china en el extranjero alcanzará los 1,25 billones de dólares en la próxima década, dijo el presidente del país, Xi Jinping, en la ceremonia de apertura de la cumbre de directores ejecutivos de la APEC celebrada el pasado noviembre en la capital china de Beijing. La cifra casi triplicará la de la inversión directa en el exterior de China durante los próximos diez años.
Con 4 billones de dólares en reservas de divisas y políticas de apoyo continuas, el potencial para un mucho mayor flujo de inversión hacia el exterior es enorme.
"Los fundamentos para el crecimiento de la inversión directa en el extranjero son prometedores y el flujo de capital hacia el exterior se acelerará más rápido que la inversión extranjera directa", concluyó Shen.