BEIJING, 3 mar (Xinhua) -- El Grupo Dirigente Central para la Profundización Integral de la Reforma de China, presidido por el presidente Xi Jinping, revisó y aprobó el 27 de febrero un plan integral de reformas para reavivar el fútbol del país, lo que ha elevado a un nivel sin precedentes la importancia del deporte en China, según el Diario del Pueblo.

La incorporación de la reforma del fútbol a la estructura integral de profundización de las reformas del gobierno central es consecuencia de la influencia del fútbol en el sector deportivo chino y en la sociedad del país, de acuerdo con un artículo publicado el lunes por el periódico del Partido Comunista de China.

"Los problemas del fútbol han alcanzado tal nivel que el mundo de fútbol y todo el mundo deportivo deben hacer lo máximo posible para lograr el éxito en la reforma", indicó Lu Yuanzhen, catedrático de la Universidad Normal del Sur de China.

¿Cómo desarrollar el fútbol en las escuelas? ¿Cómo gestionar las ligas profesionales? ¿Cómo separar la supervisión de la gestión? Estas cuestiones han permanecido sin respuesta en el mundo del fútbol durante un largo tiempo. Los departamentos administrativos deportivos y futbolísticos ya no pueden resolverlas, e incluso existen problemas estructurales en el centro de administración de fútbol de la Administración General de Deportes y la Asociación de Fútbol de China, que gestionan el deporte en el país.

Bajo dicho plan, la Asociación de Fútbol de China (AFCh) entregará los poderes de toma de decisiones a la empresa de la Superliga china, compuesta en 2005 por los accionistas de 16 clubes como entidad operadora de la máxima liga del fútbol chino, además de proveer asistencia para apoyar al Ministerio de Educación a la hora de expandir las ligas universitarias.

Se espera que estas medidas resuelvan el problema de la centralización de poder de la Asociación, el mayor accionista de la Superliga china, que gestionaba y supervisaba la liga, lo cual era propicio para el amañamiento de partidos y el soborno, puntualizaron las autoridades, según el rotativo local China Daily del lunes.

"El énfasis de las reformas consiste en la reforma del sistema y los mecanismos", opinó Zhang Qing, fundador de una empresa de consulta deportiva con sede en Beijing, citado por el Diario del Pueblo.

Conforme a Zhang, existen muchos problemas al respecto tanto en la Superliga china como en el fútbol en las escuelas y en los niveles básicos, y la separación de supervisión y gestión en la Asociación de Fútbol de China ha sido una preocupación pública desde hace mucho tiempo.

El plan también mencionó la unión de diferentes modelos de formación, incluido el fútbol en las escuelas, las escuelas de formación de fútbol, los club de fútbol y otras organizaciones sociales de fútbol. Wang Wenyi, secretario general del comité organizador del Campeonato de Fútbol de Adolescentes de China, lo considera imprescindible para mejorar el desarrollo profesional y elevar el nivel atlético del fútbol chino, ya que los adolescentes ya no tendrán que escoger desde ahora entre ir a la escuela o jugar al fútbol.

La importancia de resolver los problemas en el sistema consiste en dejar el fútbol desarrollarse según sus propias reglas. Separar la administración y la gestión puede hacer revivir las ligas chinas de fútbol, que son la parte de mayor valor comercial del sector, y romper las barreras entre los deportes y la educación puede fomentar la base deportiva del país, de acuerdo con el Diario del Pueblo.

La reforma del fútbol impulsará la reforma integral de los deportes del país. Empezar por el fútbol, que es el más difícil del sector, puede convertirlo en un modelo para la reforma de los demás deportes, sostuvo Wei Jizhong, veterano del mundo deportivo en China.

El plan integral de reformas del fútbol de China también podrá dejar de centrarse en la cantidad de medallas de oro del sector deportivo del país y modernizar el sistema deportivo nacional para adaptarlo a las características y demandas del desarrollo de la época, agrega el periódico.

En opinión de Zhang Qing, no resulta sorprendente que la reforma comience con el fútbol, puesto que los deportes son una parte de la educación además de tener otras muchas funciones sociales.

En un fuerte contraste con el enorme éxito en muchos otros deportes, China sólo se ha calificado una vez para la Copa Mundial, en 2002, cuando la selección fue eliminada en la fase de grupos sin anotar un solo gol, a pesar de la bendición de los aficionados chinos y los esfuerzos en diferentes niveles para cambiar la situación. El presidente Xi, un aficionado declarado del fútbol, al igual que cientos de miles de sus compatriotas, no está satisfecho con los decepcionantes resultados de la selección nacional.

El fútbol también se ha convertido en un tema de discusión en las reuniones entre el presidente Xi y los líderes extranjeros.

Al reunirse ayer en Beijing con el príncipe Guillermo de Inglaterra, Xi indicó que China desea aprender del juego de los principales equipos del mundo, incluido el Reino Unido. El país asiático ha cooperado con el Reino Unido en el mundo del fútbol en formas distintas, incluido un acuerdo de cooperación firmado en 2013 entre la Superliga China y la Liga Premier Inglesa (LPI).

Por su parte, el príncipe Guillermo manifestó que desea ver a más jugadores chinos en acción en la LPI de fútbol.

En vísperas de la visita a China de la presidenta de Argentina, Cristina Fernández, entre los días 3 y 5 de febrero, el embajador del país suramericano en China, Gustavo Martino, señaló que, siguiendo a los equipos adolescentes de la Superliga china de fútbol, un grupo de alumnos de una escuela primaria de la capital china estudió recientemente en el país la técnica y la cultura futbolísticas de Argentina, nación famosa por su tradición deportiva y por ser país de origen de figuras del balompié como Diego Armando Maradona y Lionel Messi.

El sector privado argentino también está analizando la viabilidad de establecer más escuelas de fútbol en China, con el propósito de apoyar el desarrollo de este deporte por el que el pueblo chino siente mucha pasión, añadió Martino.