Por Rogelio del Río
LA HABANA, 18 may (Xinhua) -- La Bienal de La Habana, la cita más importante de las artes visuales en Cuba, iniciará su XII edición el próximo 22 de mayo con la participación de alrededor de 300 artistas y curadores provenientes de 45 países de todos los continentes.
Por diversos sitios de la ciudad como galerías, parques, centros de trabajo, cines, plazas y avenidas, los artífices despliegan ya lienzos, cartulinas, esculturas, fotografías, acciones plásticas, performances, cerámicas artísticas y muchas otras expresiones de las artes visuales que convertirán la urbe en una enorme galería hasta el 22 de junio.
Entre las participantes de la Bienal, calificada como una de las más prestigiosas del mundo, es notable la presencia de artistas de América Latina, en especial de Argentina, Brasil, Chile y México.
De manera individual resaltan la brasileña Regina Silveira, la chilena Guisela Munita y el uruguayo Guillermo Zabatela, además del italiano Michelangelo Pistoletto, el francés Danial Buren, el alemán Gregor Schneider, el indio Ansih Kapoor y el afgano Aman Mojadidi.
La representación cubana incluye a casi medio millar de exponentes de las artes visuales, entre ellos los reconocidos Arturo Montoto y Lázaro Saavedra.
En esta ocasión, el tema central es "Entre la idea y la experiencia" y la temática de las producciones artísticas girará en torno a los disímiles problemas socioeconómicos y culturales -sobre todo los relacionados con la neoglobalización- que hoy enfrenta el mundo.
Los organizadores informaron que una de las muestras que animarán esta Bienal se denomina "Zona Franca" y tendrá por escenario el complejo histórico cultural Morro-Cabaña, la cual podría resultar la mayor exposición de arte cubano jamás realizada.
También estará "Detrás del muro", en su segunda edición, que intervendrá más de un kilómetro del malecón habanero, así como "Entre, dentro, fuera", en el recinto expositor Pabellón Cuba, donde confluirán creadores de varios países, con espectáculos de las artes plásticas que vinculan la música, los audiovisuales, la literatura, el cine, el teatro, la danza y performances.
Paralelo a estos proyectos se desarrollará un programa de conferencias, talleres y proyecciones de audiovisuales inspirados en la realidad cubana y que se apartan de las líneas tradicionales.
El director de la Bienal, Jorge Fernández, expresó que la cita mantiene vigente el propósito con el que se creó 31 años atrás, que es acercar el arte a todo el mundo, a todos los públicos y, a su vez, dar cabida a todas las voces artísticas, "de todos los lugares y de todas las edades".
"Hemos logrado que en barrios apartados donde se van a instalar estos proyectos artísticos tengan mejoras, como la instalación de contenedores de basura, iluminación o restauración de los parques", destacó el también director del Centro de Arte Contemporáneo Wifredo Lam.
La Bienal de La Habana nació en 1984 en los edificios del Museo de Arte como alternativa a la de Venecia, con el objetivo de abrir espacios a artistas que no tenían cabida en otros eventos de ese tipo o museos de carácter elitista.
A partir de la segunda edición, más allá de la exhibición de las obras, comenzó a organizar encuentros y talleres en las calles, lo cual permite que los creadores interactúen entre ellos y establezcan una relación con el público cubano, en una ciudad de más de un millón de habitantes.
En la historia de esta gran fiesta de las artes en espacios abiertos destacan la instalación de las hormigas de Rafael Gómez, las cucarachas de Roberto Fabelo, los elefantes de Jeff y los performances de Manuel Mendive, todos artistas plásticos cubanos.
La aspiración "mayor" de los organizadores es que el público cubano asuma la Bienal como "un bien propio, que se relacione con las obras y proyectos, que se acerque a ellas desde su perspectiva personal, que participe".
"Esperamos romper ese signo del arte contemporáneo pensado solo para las élites. En Cuba queremos que el arte sea patrimonio de la sociedad, que contribuya al mejoramiento humano", sentenció Rubén del Valle, presidente de la Bienal y del Consejo Nacional de las Artes Plásticas de la isla.