BRASILIA, 14 may (Xinhua) -- China y Brasil deberán iniciar una nueva fase de sus relaciones bilaterales, reforzando la cooperación en capacidad productiva e inversiones, durante la visita a este país del primer ministro chino, Li Keqiang, que será recibido por la presidenta Dilma Rousseff, dijo el embajador chino en Brasil, Li Jinzhang.

En entrevista con Xinhua con motivo de la próxima visita del primer ministro chino al país suramericano, el embajador resaltó que esa nueva fase responde a las necesidades de desarrollo que ambos países comparten ante los desafíos de la compleja situación económica internacional.

La visita del primer ministro, que viaja acompañado por una importante misión empresarial, del 18 al 21 de mayo, llega menos de un año después de la que hiciera el presidente Xi Jinping y en la que se firmaron más de 50 acuerdos bilaterales.

Según el diplomático, el viaje de Li Keqiang tiene un especial significado para el desarrollo de la Asociación Estratégica Integral China-Brasil y "su principal objetivo es elevar el nivel de cooperación en diversas áreas así como promover la interacción entre ambas estrategias de desarrollo para lograr un beneficio mutuo".

Durante la visita, se rubricarán acuerdos en política, economía, comercio, capacidad productiva, agricultura, área fitosanitaria y cuarentena, finanzas, minas y energía, y cultura, adelantó.

China ha entrado en una fase madura de industrialización y precisa realizar un reajuste en su proceso de desarrollo que, según indicó el embajador, se puede complementar con las necesidades del lado brasileño.

"Brasil es una economía emergente de gran importancia, dispone de un vasto territorio y ricos recursos con un gran potencial. Con el fin del ciclo de prosperidad de las materias primas, Brasil también enfrenta el desafío de reajustar su estrategia de desarrollo económico", apuntó.

El comercio de materias primas tuvo una gran importancia en la relación entre los dos países pero ahora el interés común es la cooperación en las áreas de la capacidad productiva y las inversiones.

"Creo que, en el futuro, China y Brasil van a reforzar su cooperación en la capacidad productiva en sectores como infraestructuras, logística, energía, minería o manufacturas, sobre la base del beneficio mutuo y la ganancia compartida", afirmó.

Entre los proyectos que Rousseff y Li analizarán están iniciativas de cooperación ferroviaria, especialmente el proyecto estratégico de conexión ferroviaria bioceánica entre Brasil y Perú.

También se discutirá una nueva versión del Plan de Acción Conjunta entre los dos países para convertirlo en un instrumento más ágil con metas concretas de cooperación.

China es, desde 2009, el mayor socio comercial de Brasil, el principal destino de sus exportaciones y el principal origen de sus importaciones, así como la principal fuente de inversiones productivas directas en el país sudamericano.

De acuerdo con las estadísticas de la Aduana china, el intercambio comercial entre los dos países alcanzó el año pasado 86.580 millones de dólares, de los cuales 51.690 millones correspondieron a las importaciones chinas.

Los dos países mantienen una profunda relación tanto en el plano económico como en el político, que fue elevada en 2012 al nivel de Asociación Estratégica Integral.

El embajador recordó que, el año pasado, durante la visita del presidente Xi Jinping, se firmaron compromisos por un total de 35.000 millones de dólares. Y durante la del primer ministro -aseguró- los acuerdos deben alcanzar una cifra "muy considerable".

De forma paralela, puntualizó el embajador chino, continúa el proceso de implementación de los acuerdos financieros en el ámbito del grupo BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), que el año pasado acordaron la creación de un Banco de Desarrollo y de un Fondo Contingente de Reservas.

"China y Brasil mantienen además una estrecha cooperación en los organismos financieros multilaterales, como es el caso de la reforma del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial, para alcanzar un orden internacional más justo y ordenado", resaltó.

La visita del primer ministro Li Keqiang, resumió, resultará en la definición de nuevas prioridades en las relaciones bilaterales, en especial en los campos comercial, de capacidad productiva y de cooperación financiera.

En el plano comercial, se debe impulsar un aumento de los intercambios, con mayores facilidades y mayor diversificación de los productos, dijo.

En el de la capacidad productiva e inversiones, los dos países tienen la oportunidad de vincular sus estrategias de desarrollo en el contexto de un proceso de reajuste ante los cambios en el escenario global.

Y, por último, en la cooperación financiera, además de la actuación común en los foros internacionales, se deben establecer acuerdos entre entidades financieras de los dos países para disponer líneas de crédito que impulsen las relaciones económicas y la inversión recíproca.