BEIJING, 24 jun (Xinhua) -- Una serie de incidentes violentos en los que han estado involucrados menores de edad en China ha provocado que mucha gente cuestione si debe prestarse una mayor atención a la formación moral, en lugar de a la académica, de los jóvenes chinos.
Un video publicado en línea el domingo muestra a varios adolescentes que queman con cigarrillos a un niño de primer grado en el distrito de Qingyuan, en la provincia de Zhejiang, este de China.
En el video, que dura más de dos minutos, Xiaomao (no es su nombre verdadero), menor a seis años de edad, está atado y grita de dolor cuando los adolescentes se turnan para golpearlo.
La policía dijo que Xiaomao fue descubierto a principios de mayo cuando hurtaba en una tienda junto con dos amigos. Aunque él y uno de sus amigos lograron huir, un niño fue detenido por el propietario. El niño dijo que uno de los adolescentes en el video era su cómplice.
En venganza, el adolescente y varios de sus amigos trataron de intimidar a Xiaomao, pero su padre los enfrentó, así que decidieron darle una "lección" al niño.
El acoso, peleas graves, riñas de enamorados, chantajes y la publicación de material de contenido sexual por medio de teléfonos móviles son problemas que se presentan en las escuelas de toda China, algo que parece increíble para mucha gente.
A principios de mayo, se informó que un alumno del distrito de Huaiyuan en la provincia de Anhui extorsionaba a sus compañeros de clase, a quienes exigía dinero, y a quien no cumplía sus órdenes lo obligaba a beber orina.
Incidentes como éstos pueden tener un efecto de largo plazo en la gente.
"Mi hija está tan deprimida que se niega a ir a la escuela", comentó el padre de una estudiante de secundaria del distrito de Lantian en la provincia de Shaanxi, quien huyó de casa tras ser acosada en la escuela.
El acoso, ya sera verbal o físico, tiene un impacto grave, con frecuencia en toda la vida, en la gente.
De acuerdo con una encuesta llevada a cabo el año pasado por el Centro de Investigación de Jóvenes y Niños de China, los delincuentes juveniles son cada vez más de menor edad, y los delitos relacionados con internet o drogas están en aumento.
China tiene alrededor de 279 millones de jóvenes. Más de 70 por ciento de los delitos el año pasado fueron cometidos por gente de entre 10 y 25 años de edad, indica la encuesta.
"Es una señal preocupante", afirmó Luo Kun, subdirector de la escuela primaria perteneciente a la Universidad Normal de Shaanxi. Aunque algunos expertos piden castigos más estrictos, Luo sugiere prevención en lugar de remedio.
"Nuestros niños necesitan una mejor guía moral y legal en casa y en la escuela", comentó. Los padres y maestros presionan a los estudiantes para que logren calificaciones altas, pero prestan menor atención a su desarrollo emocional, lo cual podría avivar actos violentos o incluso crímenes en el futuro.
La opinión de Luo es compartida por Huang Xuan, encargado del programa para niños de manejo de emociones y prevención de la violencia en Shaanxi.
Huang dijo que los adolescentes tienen una comprensión poco clara de la moral y sus personalidades aún no se han formado por completo. Si ven que sus padres u otros adultos en la vida real o en programas de televisión son violentos, también usarán la violencia para tener poder.
"Así que necesitamos poner un buen ejemplo, pasar más tiempo con ellos, enseñarles cómo diferenciar entre lo bueno y lo malo", dijo Zhang Yan, un sociólogo de la Academia de Ciencias Sociales de Shaanxi.