BEIJING, 1 mar (Xinhua) -- Durante la próxima sesión legislativa anual de China se prevén más reformas debido a que el debilitamiento económico exige esfuerzos renovados para reactivar los motores del crecimiento.

Una serie de datos decepcionantes a principios de año, cuando se desplomaron en enero los índices que miden la actividad industrial, los precios al consumidor y el comercio, provocaron incertidumbre que afectó el sentimiento económico.

El índice oficial de gerentes de compras (IGC) cayó por debajo de la línea de auge y caída por primera vez en más de dos años, en tanto que la inflación descendió a un nivel récord en cinco años y el comercio se desplomó más allá de las expectativas.

A pesar de los múltiples análisis que decían que las cifras de enero eran incompletas por el efecto básico del Año Nuevo Lunar, que en 2015 se celebró el 19 de febrero, continuaron las preocupaciones considerables, lo que generó nuevos llamados de flexibilización monetaria.

Aún tienen que publicarse estadísticas más recientes, con excepción de una lectura preliminar de manufactura de HSBC que muestra una mejoría marginal en febrero.

"Sin embargo, es posible que la actividad económica doméstica siga desacelerada y la demanda externa parece incierta", dijo la semana pasada el economista en jefe para China de HSBC, Qu Hongbin.

Esta perspectiva ha provocado que los economistas, incluido Qu, pidan una mayor flexibilización de la política.

"China debe flexibilizar su política monetaria para evitar el endurecimiento pasivo y reducir riesgos", escribió el economista de UBS, Wang Tao, en una nota de investigación publicada el jueves.

De hecho, el banco central de China redujo la tasa de interés de referencia en un cuarto de punto porcentual el sábado.

Sin embargo, los expertos están de acuerdo en que una solución fundamental a las dificultades económicas consiste en las reformas de largo alcance que ha emprendido el país y se espera ampliamente que la próxima sesión de la Asamblea Popular Nacional (APN), la máxima legislatura de China, sea esencial para producir resultados concretos.

Como suele suceder, se espera que el primer ministro chino presente un informe sobra la labor del gobierno, que de acuerdo con el economista del Banco Asiático de Desarrollo Zhuang Jian "revisará las medidas de reforma emprendidas en 2014".

El año pasado se implementó un programa de reforma fiscal, diseñado para mejorar los sistemas de fiscalización y de financiamiento de los gobiernos locales en un plazo de dos años; la liberalización del sistema de registro familiar, y modificaciones a las tasas de interés crediticias, lo que otorgó mayor libertad a los bancos comerciales.

El gobierno también abolió los requisitos de capital registrado y de registro administrativo para las empresas nuevas y redujo los trámites culpados de frenar la inversión privada.

La economía creció a su ritmo más lento en 24 años, al expandirse en 7,4 por ciento, lo que evidenció que China de hecho se encuentra en el avance de la "nueva normalidad".

China se esforzará por un desarrollo económico sólido e impulsará medidas de reforma y apertura firmes, dijo el presidente Xi Jinping en la cena para celebrar el Año Nuevo Lunar.

"La dirigencia china ha determinado que la reforma es la forma de impulsar el desarrollo económico, lo que estableció el tono para este año y más allá", dijo Chi Fulin, director del Instituto de China (Hainan) para Reforma y Desarrollo.

El equipo de economistas para China de Barclays espera que la APN muestre un mayor compromiso con la reforma estructural enfocada en fortalecer la asignación de recursos orientada al mercado, el reequilibrio económico y la sostenibilidad del crecimiento, dice una nota de investigación publicada el jueves.

El equipo se mostró optimista sobre la política futura y detalles de aplicación relacionados con las reformas de las empresas estatales, la administración fiscal y de deuda de los gobiernos locales, mecanismos de financiamiento, distribución de ingresos y las iniciativas del "Cinturón y la Ruta".

"La APN también indicará las prioridades de la agenda de reforma de largo plazo", comentaron dos economistas de Bloomberg en una nota publicada el viernes.

Los economistas consideraron inminente un plan nacional para transformar la propiedad y operación de empresas estatales, después de los programas piloto de 2014. También existen señales de progreso en el asunto intrincado de los derechos de las tierras rurales, importante para elevar los ingresos rurales e impulsar la urbanización.

La dirigencia china ha definido al año 2015 como "el año clave para profundizar integralmente las reformas", como "el primer año de promoción integral del Estado de derecho" y como "el último año del XII Plan Quinquenal". Como los primeros eventos políticos significativos del 2015, también se espera que las "dos sesiones" anuales aborden aspectos sociales, jurídicos y judiciales.

"Las reformas tendrán una amplia esfera y estarán mejor coordinadas para garantizar un ambiente más fuerte para el desarrollo económico", dijo un investigador de la Academia de Gobernanza de China.