BEIJING, 27 feb (Xinhua) -- China empezará a poner en una lista negra y a castigar a aquellos funcionarios que interfieran en actividades judiciales, según planes aprobados hoy viernes por el máximo comité de planificación de reforma del país.
El nuevo sistema servirá de "cortafuegos" para salvaguardar la independencia de los departamentos judiciales, de acuerdo con un comunicado emitido después de una reunión del Grupo Líder Central para la Profundización Integral de la Reforma.
Forma parte de un paquete de reforma legal más amplio adoptado por una sesión clave del Comité Central del Partido Comunista de China en octubre.
Los funcionarios del Partido y del gobierno asumen una importante responsabilidad para hacer realidad el Estado de derecho en China, y deben abstenerse de inmiscuirse con las investigaciones y los procesos judiciales, se dice en el comunicado, en que se añade que el historial limpio de los funcionarios al respecto será un índice clave en sus evaluaciones de comportamiento, sin dar más detalles sobre cómo funcionará el sistema.