BEIJING, 23 feb (Xinhua) -- Una vez que los negociadores sobre el asunto nuclear iraní se están reuniendo de nuevo, China ha reclamado una resolución política de todas las partes implicadas.
Ha pasado más de un año desde que Irán y las potencias mundiales acordaron volver a la mesa de negociación para abordar el largamente disputado programa nuclear del país asiático. Sin embargo, amplias diferencias les han impedido alcanzar un acuerdo final.
"MOMENTO CRUCIAL"
Delegados de Gran Bretaña, China, Francia, Rusia, Estados Unidos y Alemania se reunieron el domingo con negociadores iraníes en Ginebra para continuar sus esfuerzos diplomáticos a fin de alcanzar una solución integral y a largo plazo para el asunto nuclear de Irán.
Las negociaciones se encuentran en un "momento crucial", explicó a la prensa el jefe de la delegación china, Wang Qun, antes del comienzo de las conversaciones en Ginebra.
Cuando las conversaciones entran en los detalles, apuntó, los retos aumentan. "En consecuencia, la resolución política se ha vuelto imperativa e incluso urgente", enfatizó Wang, que es director general del Departamento de Control de Armas del Ministerio de Relaciones Exteriores chino.
China espera que todas las partes puedan fortalecer la confianza e inyectar impulso político a las conversaciones para alcanzar un acuerdo integral en fecha temprana, agregó.
Irán ha sido objeto de sanciones de la ONU como resultado de sus supuestos intentos de fabricar armas nucleares. Occidente acusa a Irán de desarrollar un bomba atómica bajo el abrigo de un programa civil. No obstante, Irán insiste en el propósito pacífico de su programa nuclear.
Irán aceptó suspender sus actividades nucleares a cambio de una relajación limitada de las sanciones, bajo un acuerdo temporal firmado con las seis potencias en noviembre de 2013. Cuánta capacidad nuclear puede mantener Irán y los pasos a dar para levantar las sanciones están entre los puntos a abordar en esta ronda de conversaciones.
Tras ser incapaces de limar las diferencias, los negociadores acordaron en noviembre de 2014 ampliar la fecha límite otros siete meses más.
Durante su visita a Irán este mes, el ministro de Exteriores chino, Wang Yi, instó a Irán y a las potencias mundiales impulsar de manera conjunta un "sprint final" exitoso a las maratonianas conversaciones.
Todas las partes deben tener la determinación de sobreponerse a las dificultades y a los obstáculos para garantizar un resultado exitoso, añadió Wang.
También enfatizó la posición china de una solución pacífica al asunto nuclear a través de conversaciones, e instó a todas las partes a aprovechar la "oportunidad histórica" de resolver esta cuestión.
Un acuerdo integral libraría a los iraníes de las sanciones económicas y mantendría la paz y la estabilidad en la región, aseveró el ministro chino.
"UN CAMINO POR RECORRER"
El secretario de Estado estadounidense, John Kerry, y el ministro de Exteriores iraní, Mohammad Javad Zarif, celebraron este domingo conversaciones bilaterales a puerta cerrada en un intento de estrechar aún más sus diferencias.
Las reunión fue la culminación de una nueva ronda de negociaciones bilaterales entre los dos países, que comenzaron el viernes.
Antes de dirigirse a Ginebra, Kerry advirtió en Londres de que "todavía hay diferencias importantes, todavía hay un camino por recorrer" en las negociaciones de la ciudad suiza.
Anteriormente, el máximo diplomático afirmó que Estados Unidos tiene por objetivo "avanzar hacia un marco de trabajo político para finales de marzo".
En respuesta, el líder supremo de Irán, el ayatolá Ali Khamenei, reclamó un acuerdo "detallado" de una única fase, en lugar de un acuerdo para un marco de trabajo político.
También advirtió de que los oponentes de Irán podrían abusar de un acuerdo-marco como herramienta para forzar concesiones por parte de la república islámica en un pacto final.
El líder iraní juró no rendirse a las amenazas de sanciones de Occidente, y advirtió de que su país puede tomar represalias paralizando las exportaciones de gas a los países occidentales.
El domingo, Zarif explicó a los medios estatales que Irán no firmará ningún acuerdo que sea "ambiguo e imperfecto".
Esos acuerdos quedarían abiertos a numerosas interpretaciones, y, por lo tanto, a problemas para todas las partes involucradas en las conversaciones, aseveró el ministro iraní.
En otras palabras: "no se firmará ningún acuerdo a menos que se se alcance un pacto integral", dijo Zarif según fue citado.
"Acuerdos pequeños, fragmentarios y temporales no son positivos ni para nuestro país ni para la otra parte", esgrimió.
En los últimos días se han producido buenas discusiones en Ginebra, pero no se han alcanzado acuerdo hasta el momento ya que las diferencias permanecen, en particular sobre la retirada de las sanciones contra Teherán, señaló.