Por Victoria Argüello
CARACAS, 25 oct (Xinhua) -- La juramentación de cuatro gobernadores electos del longevo partido Acción Democrática (AD, adscrito a la Mesa de la Unidad Democrática, MUD) ante la oficialista Asamblea Nacional Constituyente (ANC) provocó una "implosión" en la alianza opositora, según los analistas.
En entrevista con Xinhua, el analista Eugenio Martínez afirmó que "la juramentación es una de las últimas diferencias que ha implosionado a la MUD, y significa que pudiésemos estar ante el establecimiento de una nueva alianza o de varias alianzas de oposición al gobierno del (presidente Nicolás) Maduro".
Martínez es un articulista destacado del portal venezolano "Pro Da Vinci", de oposición.
El analista sostiene que ahora se hace evidente una contradicción agudizada desde 2016 dentro de la alianza, la cual consiste en una ausencia de unidad de criterios sobre la forma de lograr un cambio político para el país.
"No todos los líderes de los partidos tienen una lectura similar de cómo lograr una transición política en Venezuela, aunque el fin último de todos los liderazgos sea generar un cambio político, no hay acuerdo sobre cómo llegar a generar ese cambio", apuntó.
En análisis de Martínez, la contradicción principal que se presenta dentro de la coalición de partidos, es el planteamiento de la convivencia política con el Ejecutivo del presidente Maduro.
El experto indicó que "Acción Democrática ha sido más proclive al tema de la cohabitación con el gobierno de Maduro, mientras que otros partidos como Voluntad Popular o Primero Justicia, que han sido más afectados por las inhabilitaciones, han planteado una estrategia que no incluye cohabitar".
Por su parte, Diego Sequera, analista del portal chavista Misión Verdad, dijo que las diferencias de fondo entre AD y el resto de los partidos que hacen vida en la MUD son notables.
"Acción Democrática es efectivamente un partido convencional, tiene tradición y vocación de poder, mientras que estos otros grupos verdaderamente son mamparas y sucursales de los intereses financieros y empresariales aquí en Venezuela", explicó Sequera en conversación con Xinhua.
AD figura como un "adversario político" del gobierno más que como un "enemigo", apuntó el experto, para quien este partido tiene mayor capacidad de negociación con el gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) que las otras organizaciones, que incluso funcionan como "interlocutores del poder extranjero".
Según Sequera, no sólo esta alianza decide su destino, sino que existen intereses foráneos que apuntan a un cambio de gobierno en Venezuela, y que pueden presionar a los factores políticos para una nueva cohesión.
En tanto, el dirigente de AD, Henry Ramos Allup, fue acusado por el doblemente ex candidato presidencial por el partido Primero Justicia, Henrique Capriles, y el vicepresidente de la Asamblea Nacional (AN, Congreso) por Voluntad Popular, Freddy Guevara, de maniobrar políticamente fuera de las decisiones del bloque opositor.
También lo acusan de jugar una suerte de "posición adelantada" ante las venideras elecciones presidenciales de 2018, en las cuales Ramos Allup figura como una de las mejores opciones opositoras para perfilarse como candidato, según la prensa local.
