WASHINGTON, 9 sep (Xinhua) -- La Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó hoy una legislación que permite a las familias de las víctimas de los ataques del 11 de septiembre demandar a Arabia Saudí en tribunales estadounidenses, a pesar de la amenaza de la Casa Blanca de que vetará la iniciativa.
La iniciativa fue aprobada por unanimidad en el Senado en el mes de mayo y ahora será enviada al presidente Barack Obama. La Casa Blanca ha expresado su oposición a la medida.
Se requerirían los votos de dos terceras partes de los miembros de la Cámara y el Senado para anular el veto.
"Dadas las inquietudes que hemos expresado, es difícil imaginar al presidente firmando esta legislación", dijo el vocero de la Casa Blanca Josh Earnest cuando el Senado aprobó la iniciativa en mayo.
"Esta legislación modificaría una ley internacional de mucho tiempo sobre la inmunidad soberana", dijo Earnest, quien agregó que Obama sigue teniendo "serias inquietudes" en el sentido de que esta legislación volvería a Estados Unidos vulnerable en otros sistemas legales del mundo.
La legislación también ha generado críticas del gobierno saudí.
Arabia Saudí dijo a la administración Obama y a los miembros del Congreso que venderá cientos de miles de millones de dólares en activos estadounidenses en poder del reino si el Congreso aprueba la iniciativa, informó el New York Times en abril.
Adel al-Jubeir, ministro de Relaciones Exteriores saudí, comunicó personalmente el mensaje del reino en marzo durante un viaje a Washington y dijo a los legisladores que Arabia Saudí se vería obligada a vender cerca de 750.000 millones de dólares en valores del tesoro y otros activos en Estados Unidos antes de que estuvieran en peligro de ser congelados por los tribunales estadounidenses, informó el New York Times.
Las familias de las víctimas del 11 de septiembre han usado los tribunales para tratar de responsabilizar a la familia real saudí y a los bancos y beneficencias saudíes de lo que los quejosos consideran que fue el apoyo saudí al terrorismo.
Estos esfuerzos han sido bloqueados debido en parte a una ley de 1976 que otorga a otros países cierta inmunidad a la demandas en los tribunales estadounidenses.
Funcionarios saudíes han negado durante mucho tiempo que el reino haya tenido alguna participación en los planes de los ataques terroristas del 2001 que dejaron cerca de 3.000 muertos en Nueva York, Washington DC y Pensilvania.