TIRANA, 10 jul (Xinhua) -- El despliegue del sistema antimisiles THAAD en Corea del Sur por parte de Estados Unidos no es propicio para la paz en la Península Coreana, aseguró el domingo un exviceministro albanés.
"Cualesquiera que sean las preocupaciones de seguridad de Corea del Sur debido al incremento de las pruebas misilísticas de la República Popular Democrática de Corea (RPDC), no justifica el despliegue", dijo Dorian Ducka, antiguo viceministro de Energía e Industria de Albania.
El viernes, Corea del Sur y Estados Unidos anunciaron su decisión final de desplegar el avanzado sistema antimisiles Terminal de Defensa de Area de Alta Altitud (THAAD) en las Fuerzas de EEUU en Corea (USFK), a pesar de la reiterada oposición de los países vecinos.
Según explicaron, el despliegue pretende afrontar las amenazas de misiles y nucleares de la RPDC.
"La diplomacia y el diálogo han quedado marginados por la política del miedo y la falta de visión y liderazgo en algunos países avanzados y poderosos, lo cual se ha unido a la irracionalidad de determinados líderes y regímenes", dijo Ducka en una entrevista por escrito con Xinhua.
Según añadió, los intereses de seguridad surcoreanos deben ser protegidos, pero no a expensas de la paz y la estabilidad en la península.
Aseguró que, a largo plazo, el desplieuge del THAAD será tóxico para la confianza de las partes implicadas en la estabilidad de la región. "Estoy convencido de que el sistema no ayudará en absoluto a la desnuclearización de la Península Coreana", apuntó.
Ducka afirmó que se debería garantizar el papel de China, promotor activo de la paz en la península y socio estratégico del crecimiento económico de Corea del Sur, para contribuir a la estabilidad en la región.
"Creo que la única respuesta a la estabilidad en la región es el diálogo, la diplomacia, la diplomacia económica y la diplomacia antimisiles", subrayó.
El canciller chino, Wang Yi, declaró el sábado en Colombo, durante una visita a Sri Lanka, que el planificado despliegue del THAAD excede en mucho las necesidades defensivas de la Península Coreana.
En declaraciones a los reporteros, afirmó que China tiene razón y derecho a cuestionar los motivos que se esconden detrás del despliegue y subrayó que cualquier razón que se esgrima para apoyarlo es injustificada.
El jefe de la diplomacia china instó también a Seúl a mantener la cabeza fría y reflexionar sobre cuáles serían las consecuencias del despliegue para la seguridad, la paz y la estabilidad en la Península Coreana y la resolución de la cuestión nuclear.
