RIO DE JANEIRO, 27 abr (Xinhua) -- La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, aseguró hoy que luchará para evitar que "el golpe prospere", en alusión al proceso político en su contra, que está en estos momentos en manos del Senado y que podría terminar con su destitución del cargo.
En un acto sobre derechos humanos, Rousseff aseguró que, aunque el proceso está establecido en la Constitución, es "ilegal" porque "no hay crimen". "No puede haber un 'impeachment' sin base jurídica, sin crimen", por lo que lo consideró un "golpe".
En su discurso, Rousseff afirmó que "hay varias formas de golpe, con las armas en la mano o con tanques, pero también hay un nuevo tipo de golpe que se hace con las manos desnudas, rasgando la Constitución".
Rousseff, que cumple su segundo mandato dese 2010, prometió en el evento "luchar hasta el fin para garantizar que la democracia sea respetada" y resaltó que no permitirá que "algunos pretendan recortar los caminos hacia el poder".
En los próximos días, una comisión especial del Senado decidirá, por mayoría simple, si el proceso político contra Rousseff continúa o no. En caso afirmativo, se celebraría el juicio durante un máximo de 180 días, plazo en el que la presidenta sería apartada del cargo y reemplazada por el vicepresidente Michel Temer.
El Gobierno y sus seguidores consideran que la acción es un "golpe", mientras que la acusación asegura que Rousseff cometió un delito fiscal al maquillar las cuentas públicas en 2014 y 2015.