"Espero que todos se unan a mí para pedir a los líderes mundiales que coloquen a los niños, en especial a los más desfavorecidos, en el centro de los nuevos objetivos mundiales", señaló.
A inicios de este año, Beckham celebró su décimo año como embajador de buena voluntad de Unicef con la puesta en marcha del Fondo David Beckham de Unicef para utilizar su voz, influencia y conexiones a fin de recaudar fondos vitales, combatir la desigualdad y buscar una transformación positiva duradera para los niños más vulnerables del mundo.
En la ceremonia también participaron el secretario general de la ONU Ban Ki-moon y el director ejecutivo de Unicef, Anthony Lake.