En Australia, Corea del Sur y la anfitriona son las dos primeras semifinalistas de la Copa Asiática.

Los surcoreanos superaron en la prórroga a Uzbekistán en un duro partido mientras que los anfitriones aguantaron el empuje inicial de China para superar a los de Alan Perrin con dos goles del veterano Tim Cahill.

Australia salió a jugar su encuentro más importante en lo que va de torneo. Tras las dudas que dejó la derrota ante Corea del Sur en la fase de grupos, un nuevo tropiezo daría al traste con las esperanzas de un grupo que ha jugado todas sus cartas a esta Copa de Asia.

Sin embargo, el rival no era el más propicio para lograr un triunfo fácil. China, que logró tres victorias en un exigente Grupo B, saltó al césped de Brisbane sin complejos, algo que no se veía desde que los dragones rojos dominaran la clasificación para el Mundial de Corea y Japón en 2002.

El primer tramo del partido fue de dominio chino. Wu Lei, como hombre más adelantado, puso en aprietos a la pareja de centrales aussie, formada por Sainsbury y Wilkinson. El punta del Shanghai East Asia trajo de cabeza a una Australia que sólo despertó pasado el ecuador del primer acto.

Mathew Leckie, quien obligó a Wang Dalei a emplearse a fondo, y Sainsbury, con un cabezazo que se fue alto, rondaron el gol para los australianos, que fueron mejores a partir del minuto 25 de partido. Sin embargo, el 0-0 se mantendría hasta el paso por vestuarios.

Australia confirmó su dominio tras la vuelta al campo. Alan Perrin, seleccionador chino, se temía una avalancha de los anfitriones en la segunda parte y dio entrada a Jiang Zhipeng por Mei Fang en el centro de la defensa. A pesar del cambio, la zaga china no pudo evitar el tanto de Tim Cahill, de chilena, en el minuto 49, un gol que ponía por delante a los suyos de forma merecida.

China no superó el golpe y las ocasiones comenzaron a caer en la portería de Wang Dalei. El meta del Shandong Luneng, el más destacado de los suyos, contuvo al ataque australiano tanto como pudo, hasta que, de nuevo Tim Cahill, en el minuto 65, puso el 2-0 con un cabezazo inapelable que entró junto al palo.

Sin nada que perder, China adelantó sus líneas y a punto estuvo de marcar al paso por el minuto 70, pero Maty Ryanfrustró el doble intento del ataque chino.

Hasta el final, Australia contó con las mejores ocasiones, pero Wang Dalei frustró, una y otra vez, las tentativas locales. Con 2-0 terminó el partido, el cual vio la clasificación de una Australia que, en semifinales, se medirá al vencedor del encuentro entre su verdugo en la final de 2011, Japón, y Emiratos Árabes Unidos.

China, por su parte, deja el torneo con el sabor agridulce de haber logrado pasar de ronda de forma inmejorable para encontrarse con el rival menos deseado demasiado pronto. En todo caso, los dragones rojos pueden haber sembrado en Australia la semilla de un proyecto que lleve, en los próximos años, a China a un nivel superior.

Mientras, en el partido que abría los cuartos de final, Corea del Sur y Uzbekistán jugaron un partido de poder a poder. De hecho, los goles surcoreanos no llegarían hasta la prórroga, cuando Son Heung-min, en los minutos 104 y 120, puso a los suyos en semifinales.

Tras una primera parte con alternativas en ambas porterías, fueron los dos guardametas los más destacados en los primeros 45 minutos.

Uzbekistán, que comenzó mejor, tuvo sus primeras ocasiones en las botas de Bakhodir Nasimov y Sanjar Tursunov, aunque ambos se encontraron con un inspirado Kim Jin-hyeon, quien todavía no ha encajado un gol en el presente torneo.

Tras el potente arranque uzbeko, fue Corea del Sur la que probó su suerte. Lee Keun-ho y Nam Tae-hee se encontraron, de forma consecutiva, con Nesterov, quien volvería a multiplicarse para mantener el empate ante la ocasión de Lee Jeong-hyeop, quien remató de cabeza al saque de una falta justo antes del intermedio.

En la segunda parte ambos conjuntos bajaron el ritmo, aunque Sardor Rashidov, para los uzbekos, tuvo la mejor ocasión de este período, cuyo fin llegó con el 0-0 inicial.

Los goles no llegarían hasta el tiempo añadido. Cuando la primera parte de la prórroga llegaba a su fin, Uzbekistántrataba de sacar el balón jugado después de que los surcoreanos reclamaran un inexistente penalti.

Shukhrat Mukhammadiev perdió el baló y Kim Jin-su centró para que Son Heung-min, dentro del área pequeña, batiera a unNesterov que vio como el pase a semifinales se escapaba entre sus manos.

Uzbeskitán se lanzó a la desesperada a por un empate que forzará la tanda de penaltis pero los hombres de Stielike golpearían de nuevo a la contra. Cha Du-ri, tras una espectacular carrera, habilitaba de nuevo al delantero del Bayer Leverkusen, que fusilaba la meta uzbeka y cerraba el marcador.

Corea del Sur espera ahora rival para semifinales, el cual saldrá del duelo entre Irán e Irak. Uzbekistán, por su parte, suma una nueva decepción a su larga lista y confiará en la clasificación para el Mundial de Rusia 2018 para curar sus heridas y, por fin, mostrar su mejor versión. (Fuente：CCTV.com)