BEIJING, 25 feb (Xinhua) -- Las ventas de fuegos artificiales en Beijing por la Fiesta de la Primavera cayó 32 por ciento este año debido a que los residentes conscientes sobre el medio ambiente abandonaron las celebraciones tradicionales de la festividad más importante.
Un total de 195.000 casquillos de cohetes se vendieron en los 11 días de las fiestas hasta el 23 de febrero, anunció hoy la oficina de la administración de fuegos artificiales del gobierno municipal de Beijing. El Año Nuevo Lunar se celebró este año el 19 de febrero.
La contaminación en la capital ha sido objeto de quejas del público en los dos últimos años y los fuegos artificiales pueden llevar a alzas en las lecturas de la contaminación del aire.
En Beijing, el periodo oficial de ventas de cohetes de este año se redujo de 20 a 11 días y la cantidad de comercios autorizados a vender se redujo en 20 por ciento.
La ciudad incumplió su meta de contaminación el año pasado y para este año prometió hacer esfuerzos mayores.
Encender fuegos artificiales durante el Año Nuevo es una tradición en China porque se cree que las luces y los sonidos espantan a los espíritus malignos. En los años más recientes, los fuegos artificiales han llevado una atmósfera festiva a la Fiesta más importante del país.
La contaminación del aire alcanzó "niveles peligrosos" en 106 ciudades chinas en lo más intenso de las celebraciones.