5.Espectadores comesandías Tal vez es una costumbre de los curiosos transeúntes chinos parar su paso para formar un círculo de mirones cuando suceda algo en la calle – De hecho, cualquier suceso tendrá el mismo efecto.
Sea un acontecimiento que se marcará en la historia humana o un accidente minucioso sin dejar ningún impacto visible, los observadores chinos lo mirará con toda atención puesta como si fuese un número de entretenimiento.
Escribe en la novela “La vida de Q” el pensador y autor revolucionario Lu Xun, la indiferencia del público chino les permite aceptar las ocurrencias en frente a sus ojos como un capítulo de ópera, sin que les conmueva el alma.
Hoy día, los chinos siguen mirando y observando, más bién a base de un sentido filosófico al ponerse en el asiento de los espectadores. Y, para agregarle un poco de sabor, pueden apreciar la vista comiendo sandía, piernas de pollo, fideos instantáneos, tortillas tostadas, semillas del girasol... etc..
Si la vida me da la sal, pues mejor preparo el limón y el tequila”, explicó un internauta chino sobre el fenómeno de los espectadores comesandías.