(Foto: Sun Li)
Aunque, lo que más llama la atención son los azulejos que aparecen en cualquier rincón, cualquier detalle: en las lámparas, dentro del ascensor, o utilizados como manteles individuales de la mesa. Entre ellos se mezclan diferentes modelos y dibujos pero… ahí está el gran poder del “mix-match” (aunque… cómo odio esta palabra, Dios!). También son colecciones de Zhang Zhenyan que se empezó a obsesionar con los azulejos en la época de los 90.
Estar en “Yu Qian Shi Wei” también causa la sensación de estar en casa. Las habitaciones se sitúan en la segunda planta, en unas pequeñas galerías que rodean los dos patios de luz, con sillas y mesitas, al aire libre. Perfecto para disfrutar de una buena conversación, una cerveza y unos cigarrillos, y sobre todo, de noche. Es una zona con mucha privacidad y elegancia a la vez.