"Siria debe ser un Estado democrático y no sectario basado en la ciudadanía y el pluralismo político", señala el documento de puntos en común.
El documento señala además que las mujeres gozarán de igualdad de derechos y representación en todas las instituciones y estructuras de toma de decisiones a un nivel de al menos 30 por ciento durante la transición y después de ella.
Siria rechaza categóricamente el terrorismo y se opone con firmeza a las organizaciones e individuos terroristas identificados por el Consejo de Seguridad de la ONU y participará en tareas nacionales y asociaciones internacionales para derrotar el terrorismo y atender sus causas.
"Los sirios están comprometidos con reconstruir un ejército nacional firme y unificado, también a través del desarme y la integración de miembros de grupos armados que apoyan la transición y la nueva Constitución", señala el documento.